Así lo acuerda el fiscal jefe de la Audiencia Nacional, Javier Zaragoza, en un oficio dirigido al consejero de Interior de la Generalitat, Felip Puig, al que le pide que le informe "a la mayor urgencia posible" de las actuaciones practicadas por los Mossos d'Esquadra sobre los hechos y que le remita "cuantas evidencias acrediten su realización y la identificación" de sus autores.
El fiscal señala que lo ocurrido podría ser constitutivo de un delito de injurias graves al Rey, "así como de un delito de ultraje a España (...), para cuya investigación y enjuiciamiento es competente la Audiencia Nacional".
El primero está castigado con penas que van desde multa de cuatro a veinte meses hasta prisión de seis meses a dos años; mientras que el segundo acarrea una pena de siete a doce meses.
Los incidentes tuvieron lugar al término de una manifestación independentista celebrada el pasado domingo por la tarde entre la plaza Urquinaona y el Arco del Triunfo.
Una parte de los manifestantes continuó hasta el Fossar de les Moreres y, de camino hacia ese lugar, tres encapuchados quemaron en el Paseo Lluís Companys una bandera española.
Luego, otros cuatro encapuchados quemaron en el Passeig del Born una foto del Rey, otra bandera española y una francesa, entre vivas a la extinta organización terrorista Terra Lliure.