El grupo insurgente Movimiento Islámico de Uzbekistán (MIU) ha reclamado este miércoles la autoría del asalto ejecutado el domingo contra el Aeropuerto Internacional Jinnah de Karachi, en el que murieron al menos 39 personas, incluidos los diez atacantes.
El MIU ha detallado a través de un comunicado que el ataque fue ejecutado en venganza por los bombardeos llevados a cabo por el Ejército de Pakistán contra las Áreas Tribales Federalmente Administradas (FATA) durante el mes de mayo.
El grupo, que cuenta con bases en la región de Waziristán del Norte, fue fundado en 1998 con el objetivo de derrocar al presidente de Uzbekistán, Islam Karimov, y aplicar la 'sharia' (ley islámica) en el país, actualmente secular.
El MIU opera en colaboración con el grupo insurgente Tehrik-i-Taliban Pakistan (TTP), conocido como los talibán paquistaníes, que el mismo domingo reclamaron la autoría del ataque, si bien anunciaron que el asalto había sido llevado a cabo en colaboración con milicianos uzbekos, sin facilitar más detalles.
En su reclamación de autoría, el TTP prometió que se trata "solo del principio" en su venganza contra las operaciones del Ejército paquistaní. "Es solo el principio, nos hemos vengado de un (Mehsud), pero tenemos que vengar a cientos", declaró el portavoz del grupo, Shabidulá Shahid, en referencia al antiguo líder del TTP, Hakimulá Mehsud, abatido en un bombardeo de un 'drone' estadounidense el pasado noviembre.
"Nosotros hemos llevado a cabo este ataque contra el aeropuerto de Karachi y es un mensaje al Gobierno paquistaní de que seguimos estando vivos para reaccionar ante los asesinatos de personas inocentes en bombardeos contra sus localidades", subrayó el portavoz.
Asimismo, Shahid explicó que el atentado contra el aeropuerto de Karachi estaba previsto desde hacía meses pero el TTP decidió aplazarlo debido a las conversaciones de paz con el Gobierno de Nawaz Sharif. En este sentido, calificó dichas conversaciones de "herramienta de guerra" del Ejecutivo.