La Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Navi Pillay, denunció hoy que las ataques del Ejército israelí contra Gaza podrían constituir crímenes de guerra.
"Los ejemplos que acabo de mencionar (descripción de ataques israelíes contra civiles indefensos) parece que muestran que la ley humanitaria internacional ha sido violada hasta un alcance que podrían constituir crímenes de guerra", señaló Pillay ante el Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que hoy celebra una sesión especial sobre la incursión israelí.
Pillay comenzó su declaración recordando que los ataques israelíes han causado la muerte de 600 palestinos -entre ellos al menos 147 niños y 74 mujeres-, el 74 % de los cuales eran civiles.
La Alta Comisionada señaló también que 27 soldados y 2 civiles israelíes han muerto durante estos ataques.
Pillay destacó que los civiles y sus hogares no deben ser objetivos militares.
"Las casas de civiles no son objetivos legítimos, a menos que sean usados o contribuyan a propósitos militares. En caso de duda, las casas de civiles no son objetivos legítimos".
La Alta Comisionada calificó como "inaceptable" que se lancen cohetes desde áreas densamente pobladas, como presumiblemente hace el grupo islamista Hamás, "sin embargo, la ley internacional es clara: las acciones de una parte no absuelven a la otra de su responsabilidad de respetar sus obligaciones bajo la ley internacional".
Pillay se hizo eco del argumento israelí de que alerta antes de atacar, pero recordó que éstos avisos debería ser claros, creíbles y dejar suficiente tiempo para que las personas se protejan.
Sin embargo, a la población "no se le da suficiente tiempo para dejar sus hogares, y aunque lo hagan, no tienen donde esconderse ni saben cuándo ni dónde será el próximo bombardeo".
Pillay recordó, que uno de estos proyectiles lanzados supuestamente para alertar, destruyeron un techo y mataron a tres niños.
La Alta Comisionada hizo especial hincapié en el alto precio que pagan los niños y recordó el caso de cuatro menores que perdieron la vida y otros siete quedaron gravemente heridos mientras jugaban en la playa.
"La indiferencia por la ley humanitaria internacional se hizo evidente cuando bombardeos aéreos y navales atacaron directamente a siete niños que jugaban en la playa y que obviamente no estaban participando de las hostilidades".
Pillay reiteró a todas las partes del conflicto "Israel, Hamás y otros grupos armados palestinos" que apliquen la ley internacional y dejen de tener como objetivo a los civiles.
La Alta Comisionada pidió también el inmediato levantamiento del bloqueo al que Israel tiene sometida a la población de Gaza.
Recordó que desde el 12 de junio Israel ha detenido a más de 1.200 palestinos en Cisjordania y Jerusalén Este, muchos de los cuales han sido puesto en detención administrativa, lo que significa que están presos sin que pesen sobre ellos ningún cargo.
"En Cisjordania, Israel continúan expandiendo sus asentamientos, demoliendo hogares palestinos, usando excesivamente la fuerza, abusando de forma continuada y viola constantemente los derechos humanos de la población ocupada".
"La cultura de impunidad ante las alegaciones de violaciones de derechos humanos invita a más transgresiones y más víctimas. Todas las alegaciones deben ser investigadas, y hasta ahora, no lo han sido", concluyó Pillay.