Más de 60 miembros del grupo yihadista Estado Islámico (EI) murieron en los últimos dos días en el norte de Irak en combates con las fuerzas kurdas y en bombardeos de la coalición internacional, informó hoy a Efe un responsable de seguridad.
El jefe de la comisión de seguridad de la provincia de Nínive, Mohamed al Bayati, explicó que el EI trasladó hoy a la ciudad de Mosul 42 cadáveres y un gran número de heridos.
Estas víctimas se registraron el pasado 30 de enero en la ciudad de Kirkuk, también en el norte de Irak, que fue escenario de enfrentamientos entre el EI y las fuerzas kurdas "peshmergas".
Entre los muertos figuran algunos turcomanos, de la localidad de Al Mahlabia, que luchaban en las filas del grupo extremista, según la fuente.
El ataque yihadista contra Kirkuk derivó en combates en los que también fallecieron y resultaron heridos milicianos kurdos, aunque no se dispone de una cifra exacta.
Ayer, los combatientes del EI lanzaron una ofensiva similar en el pueblo de Shanduja, en Nínive, lo que llevó a la intervención de los aviones de la coalición internacional.
Los bombardeos aéreos de esta coalición causaron la muerte de al menos 22 miembros del EI y la herida a decenas de ellos, así como a cinco de los "peshmergas".
Irak vive desde el pasado junio una cruenta lucha contra el EI, que ha proclamado un califato en zonas de ese país y de Siria bajo su control.
La coalición, liderada por Estados Unidos e integrada por varios países árabes, bombardea desde el pasado septiembre posiciones de los extremistas en esos dos países.
La misión de Naciones Unidas en Irak (UNAMI) anunció hoy que al menos 1.375 iraquíes murieron y 2.240 resultaron heridos en actos terroristas y de violencia en el país árabe durante el mes de enero.