Un grupo de diecinueve eritreos partieron hoy desde el aeropuerto romano de Ciampino hacia Suecia, en el primer traslado de refugiados del programa de reubicación de 160.000 demandantes de asilo en la Unión Europea (UE).
Estas personas, las cinco mujeres y los catorce hombres, marcharon a bordo de un avión ATR de la Guardia di Finanza (Policía de fronteras y delitos fiscales) de Italia, que despegó a las 9:45 horas (7:45 GMT).
Los diecinueve refugiados han estado desde su llegada a Italia en centros de acogida de Catania, en la isla de Sicilia, y también de la isla sureña de Lampedusa.
Momentos antes de partir se hicieron fotos en el hangar de los bomberos, sonrientes, mostraron gestos de victoria y sujetaron en la mano sus documentos de identidad, que serán posteriormente validados por las autoridades suecas.
A la base aérea de Ciampino acudieron el ministro italiano del Interior, Angelino Alfano, el comisario europeo de Migración, Interior y Ciudadanía, Dimitris Avramopulos, y el ministro de Asuntos Exteriores y Europeos y de Inmigración y Asilo de Luxemburgo, Jean Asselborn, cuyo país ejerce la presidencia de turno de la UE.
Los tres saludaron uno a uno a cada uno de los refugiados antes de despegar y también se hicieron fotos con ellos.
Tras subir las escalerillas del avión, los diecinueve eritreos se despidieron desde la puerta de la nave que les llevará a Suecia, a la ciudad de Lulea, a poca distancia del círculo polar ártico.
"No tengo palabras para expresar lo que siento este día. Lo considero un milagro", afirmó Solomun, de 33 años, uno de los refugiados que hoy emprendió su periplo al norte de Europa.
Preguntado sobre por qué ha elegido Suecia como destino final, Solomun explicó que solo quiere "un país en paz" y este "era el país que más paz" le daba.
Ahora comenzará una nueva vida, lejos de su país de origen, y tiene la intención de empezar a estudiar para lograr su sueño: "ser diseñador gráfico".
Este es el primer reparto que se produce después de que la UE decidiera en una primera fase la reubicación en dos años de 40.000 refugiados llegados a Grecia e Italia, principales receptores de inmigrantes que huyen de zonas en conflicto en Oriente Medio y África.
Poco después los Veintiocho aprobaron el reparto de otros 120.000 refugiados llegados a territorio europeo en dos años (66.000 durante los primeros doce meses de aplicación del reparto).
Todo a pesar del voto contrario de Eslovaquia, República Checa, Hungría y Rumanía.
Italia, por su posición geográfica que la convierte en puente natural entre el continente africano y el europeo, ha recibido en los últimos años un elevado flujo migratorio, sobre todo desde las costas libias, que ha saturado su sistema de acogida.
El pasado 1 de septiembre, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) señaló que 351.000 inmigrantes y refugiados llegaron a Europa a través del Mediterráneo en lo que va del año, mientras que 2.643 murieron en el intento.