El presidente de EEUU, Barack Obama, rechazó hoy la posibilidad de crear una zona de seguridad en el norte de Siria por cuestiones "prácticas", porque implicaría tomar militarmente gran parte del país.
Obama realizó estas declaraciones en la rueda de prensa que siguió a su reunión en la ciudad alemana de Hannover con la canciller alemana, Angela Merkel, con la que abordó cuestiones como el acuerdo comercial entre su país y la UE, la situación en Siria y Libia, el conflicto de Ucrania, las diferencias con Rusia y la crisis de los refugiados.
El presidente destacó que su rechazo no se basa en una "objeción ideológica" sino una mera "cuestión práctica", ya que es muy complejo establecer una zona de seguridad con éxito, pues hay que destacar un gran número de tropas de tierra, controlar movimientos y establecer controles.