El presidente del PP, Mariano Rajoy, está convencido de que su partido “sacará a España de la ruina a la que le lleva Zapatero” y que él conseguirá ser un jefe del Ejecutivo “patriota”, “resolutivo” y “moderado”, que al país “le vendrá bien”.

Estas son algunas de las palabras pronunciadas por Rajoy en una entrevista que publicaba ayer el diario El Mundo, en la que afirma que “el cuento de los brotes verdes ha durado lo que la campaña electoral”, pues “otra vez han vuelto a engañar a los españoles”.

“En vez de poner en marcha las reformas necesarias que todo el mundo le estamos pidiendo vuelve a las viejas y fracasadas recetas de subir los impuestos”, señala Rajoy, quien afirma además que “Zapatero debe ser quien mueva ficha y se someta a una cuestión de confianza”.

Cuando se le pregunta sobre si los populares se han sentido “acosados” por el juez Baltasar Garzón en el caso Gürtel, Rajoy contesta que cree que el magistrado “no está en condiciones de juzgar asuntos políticos, porque ha sido candidato del PSOE y diputado de ese grupo político”.

“Por propia prudencia debería no meterse en estos asuntos”, agrega Rajoy.

Sobre el futuro político de Alberto Ruiz-Gallardón, dice que lo ve a su lado, que “es un extraordinario alcalde” y que le gustaría que fuera el candidato del partido en 2011.

También se pronuncia sobre el futuro de la central de Garoña: “Cerrar Garoña es un enorme error, pero Zapatero está preso de sus prejuicios y sus modernidades antiguas”.

En relación a la subvención de la Junta de Andalucía a una empresa en la que trabaja una hija de Manuel Chaves, cuando él era presidente, Rajoy afirma: “Si lo publicado es cierto, Chaves debe dejar la vicepresidencia. En esto pienso llegar hasta el final”.