Fuertes vientos en el río St. Clair, en la frontera entre Canadá y Estados Unidos, provocaron que alrededor de 1.500 estadounidenses entrasen de forma ilegal en Canadá el domingo flotando en colchonetas inflables, informaron hoy los medios locales.
Desde hace meses, los medios de comunicación han especulado con la idea de que miles de estadounidenses emigrarán a Canadá en caso de una victoria del candidato republicano Donald Trump en las elecciones presidenciales de Estados Unidos.
Y más de uno podría haber confundido la "invasión" de bañistas estadounidenses que sufrió el domingo la localidad canadiense de Sarnia (a unos 300 kilómetros al oeste de Toronto) con la primera oleada de estos "refugiados políticos" estadounidenses.
En realidad, los cerca de 1.500 estadounidenses que acabaron en Canadá el domingo eran bañistas que participaban en un festival anual que se celebra cada año en Port Huron (EEUU), en el que miles de personas flotan en colchonetas y cámaras de aire en el río St. Clair, que separa Estados Unidos y Canadá.
Pero vientos de hasta 50 kilómetros por hora empujaron a muchos de esos bañistas hacia la costa canadiense, lo que obligó al Servicio de Guardacostas de Canadá a rescatar a unas 1.500 personas.
Peter Garapick, del Servicio de Guardacostas canadiense, declaró hoy a la radiotelevisión pública del país, la CBC, que "había gente en lugares donde nadie pensaría que algo pudiese flotar, pero había estadounidenses en todas partes".
Una vez rescatados, las autoridades canadienses reunieron a todos los estadounidenses en autobuses que los devolvieron a Estados Unidos escoltados por vehículos policiales.
La Policía de Sarnia dijo en su página de Facebook que "fue una locura, pero al final todo funcionó".