Un pescador filipino ha guardado durante diez años una perla de ostra de 34 kilos que si se confirma su autenticidad se convertirá en la más grande descubierta en el mundo, por delante de la de Lao Tzu o perla de Alá, de 6,4 kilos, informan hoy medios locales.
El pescador encontró la perla en aguas de la isla de Palawan (oeste del país) y la conservó todo este tiempo debajo de su cama como un talismán, según el diario Inquirer.
Una mudanza sacó a la luz la descomunal pieza y un familiar del pescador, Aileen Cynthia Amurao, que trabaja en la oficina provincial de Turismo, decidió llevarla al Ayuntamiento de Puerto Princesa, la capital de la provincia.
Amurao indicó en declaraciones al citado rotativo que en un principio confundió la concreción de 61 centímetros de ancho por 21 centímetros de largo con un coral extraído del fondo marino.
Las autoridades municipales de Puerto Princesa están a la espera de que un especialista les ayude a determinar si realmente se trata de la perla de ostra más grande descubierta en el mundo o se trata de otra cosa.
La perla conocida como de Lao Tzu o de Alá, que es la mayor localizada hasta la fecha, también fue descubierta en Filipinas, en el mar de Joló, en 1939, y fue tasada en 93 millones de dólares (82,4 millones de euros) en 2003.