El presidente de EEUU, Barack Obama, condenó hoy las denuncias "sin precedentes" e "irresponsables" del candidato republicano a la Casa Blanca, Donald Trump, sobre una posible manipulación del sistema electoral en su contra para evitar que gane en los comicios del 8 de noviembre.
Obama subrayó que no había visto antes en su vida ni existen precedentes en la historia política moderna del país de un candidato a la presidencia "tratando de desacreditar" unas elecciones antes de que tenga lugar la votación.
Por ello, durante una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro italiano, Matteo Renzi, en la Casa Blanca, Obama aconsejó a Trump que deje de "quejarse" y empiece a defender su agenda en busca de votos, porque, a su juicio, esa actitud no muestra el tipo de liderazgo necesario para ser presidente de EEUU.
Las denuncias de Trump "aparentemente no están basadas en hechos" y "no muestran el tipo de liderazgo y fortaleza que uno quiere en un presidente", declaró Obama.
Según Obama, "una de las mejores cosas" que tiene la democracia estadounidense es que cuando se acaba una contienda política, que puede ser "implacable" a veces, "históricamente la persona que pierde felicita al ganador".
"Así es cómo la democracia sobrevive", porque es algo "más importante" que cualquier campaña individual, continuó Obama.
Trump ha llegado a pedir a sus simpatizantes que vigilen los lugares de votación para identificar un posible fraude electoral, lo que ha aumentado los temores a que el magnate pueda negarse a aceptar una eventual derrota en noviembre frente a la candidata demócrata a la Casa Blanca, Hillary Clinton.
El magnate lleva días insistiendo en sus mítines, sin presentar pruebas, en el supuesto amaño del sistema electoral en su contra, supuesto del que se han desmarcado figuras del Partido Republicano como el presidente de la Cámara de Representantes, Paul Ryan.