La Comisión Europea (CE), Eslovenia y Croacia decidieron hoy cooperar más para incrementar la fluidez y reducir el tiempo de espera en los controles en la frontera entre ambos países, que se han intensificado con la entrada en vigor de una nueva normativa comunitaria.
El presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Juncker, se reunió al margen de la cumbre de líderes de la UE para aprobar las directrices de la negociación del "brexit" con los primeros ministros de Eslovenia, Miro Cerar, y de Croacia, Andrej Plenkovic, a fin de abordar la situación del flujo de personas en la frontera de ambos países.
"Tuvimos una conversación constructiva con el espíritu de encontrar una solución", indicaron en un comunicado.
Los atascos entre Eslovenia y Croacia se producen desde que el pasado 7 de abril entraron en vigor los controles reforzados en las fronteras exteriores de Schengen, adoptados para reducir los riesgos de ataques terroristas.
Eslovenia y Croacia son ambos miembros de la Unión Europea (UE), pero este último país no lo es de Schengen, que reúne a 26 Estados europeos en un área de libre circulación.
La CE, Eslovenia y Croacia estuvieron de acuerdo en que la nueva ley comunitaria "debe ser aplicada y implementada".
En ese contexto, celebraron que Croacia vaya a tener "total acceso" al sistema de información de Schengen para el próximo 27 de junio.
"La Comisión está dispuesta a asistir a Eslovenia y Croacia a la hora de proporcionar soluciones a corto y largo plazo eficaces y no burocráticas para la implementación de los controles sistemáticos en las fronteras", señaló el Ejecutivo comunitario.
Ambos países consideraron las directrices técnicas proporcionadas por la CE como una "ayuda" y una "buena base para su futura cooperación".
Además, Eslovenia y Croacia acordaron que notificarán a la CE -de acuerdo con el código de fronteras Schengen-, la decisión de llevar a cabo controles selectivos cuando el tiempo de espera en un punto específico de su frontera sea superior a 15 minutos.