Teherán, la capital iraní, sacudida por el temblor sin que por el momento las autoridades hayan reportado víctimas o importantes daños materiales.
Un terremoto de 5,2 grados en la escala de Richter sacudió hoy la capital iraní, Teherán, sin que por el momento las autoridades hayan informado de víctimas o importantes daños materiales.
El Centro Sismológico de Irán, dependiente de la Universidad de Teherán, informó de que el terremoto tuvo lugar a las 23.29 hora local (19.59 GMT), y su epicentro se registró en la zona de Meshken, entre las provincias de Teherán y Alborz.
Por su parte, el Servicio Geológico de Estado Unidos (USGS), cifró la magnitud del movimiento telúrico en 4,9 en la escala abierta de Richter y ubicó su epicentro en la ciudad de Malard, situada a unos 40 kilómetros de la capital.
Numerosos habitantes de Teherán abandonaron sus casas y se encuentran en estos momentos en la calle ante el temor a nuevas réplicas o a un seísmo mayor, según pudo constatar Efe.
Bahar, una arquitecta de 35 años, fue una de las vecinas de uno de los barrios del norte de Teherán que decidió esperar en la calle a que la situación se calmara.
"Me asusté muchísimo, nunca había sentido un temblor tan fuerte", dijo a Efe Bahar, quien detalló que su en su casa vibraron los cristales de las ventanas y se movieron algunos muebles.
El terremoto también se sintió en otras ciudades cercanas como Qom, Qazvin y Karag.
El responsable de la Organización de Gestión de Crisis de Teherán, Esamail Nayar, dijo a los medios oficiales que todas las instituciones están preparadas para prestar ayuda y que la policía está "en alerta".
También los hospitales y el cuerpo de los bomberos anunciaron estar en alerta máxima ante cualquier emergencia, mientras las autoridades llamaron a la calma.
Irán tiene una gran actividad sísmica y en las últimas semanas se han registrado numerosos terremotos, varios de ellos superiores a 6 grados en la escala de Richter.
El pasado 12 de noviembre, un fuerte seísmo de magnitud 7,3 causó 620 muertos y más de 12.000 heridos en la provincia de Kermanshah, en el noroeste de Irán y fronteriza con Irak.
Los terremotos más graves hasta la fecha en Irán se produjeron en diciembre de 2003 y en junio de 1990, cuando perdieron la vida 31.000 y 37.000 personas, respectivamente.