La ministra francesa de Ordenación del Territorio, Jacqueline Gourault, lanzó hoy un mensaje de advertencia sobre las protestas de los "chalecos amarillos"
La ministra francesa de Ordenación del Territorio, Jacqueline Gourault, lanzó hoy un mensaje de advertencia sobre las protestas de los "chalecos amarillos" porque "hay elementos violentos que quieren que Francia caiga en el caos".
En una entrevista al canal "BFMTV", Gourault puntualizó que esa no es la actitud de todos los "chalecos amarillos", pero sí de una parte, y puso como ejemplo el de un portavoz que había manifestado su intención de asaltar el Palacio del Elíseo, sede de la presidencia.
También se refirió a que durante los disturbios del pasado sábado en que una parte de la prefectura (delegación del Gobierno) de Puy en Velay (centro) fue incendiada, algunos manifestantes gritaban a las personas que había en el interior del edificio: "Os vamos a asar como a pollos".
La responsable de Ordenación del Territorio explicó que, de cara a la nueva jornada de protestas que se han convocado para el próximo sábado, y en particular en París, han recibido informaciones de que "más allá de los chalecos amarillos, hay grupúsculos que quieren el enfrentamiento" de forma que "hay riesgos de que las cosas vayan mal".
El sábado de la semana pasada, los altercados se saldaron con cientos de detenidos en toda Francia y 236 heridos.
El Elíseo, que ha pedido a los partidos políticos, a los sindicatos y a la patronal que lancen mensajes de calma, advirtió ayer de que ha detectado "un núcleo de varios miles de personas" que tienen intención de acudir a París "para destrozar y para matar".
Esta mañana cinco de los grandes sindicatos franceses se reúnen para discutir de la crisis social que vive el país, y de la que hasta ahora han quedado al margen ya que los "chalecos amarillos" surgieron y han proliferado fuera de los espacios de representación institucionales.
Gourault afirmó que Macron, quien pese a la gravedad de la situación no ha hecho declaraciones públicas desde que el pasado domingo volvió de la cumbre del G20 de Buenos Aires, hablará de aquí al sábado: "Sé que el presidente de la República va a tener que hablar".
Su popularidad, que está por los suelos, ha vuelto a resentirse, según un sondeo de YouGouv publicado hoy, según el cual sólo le apoya el 18 % de la población, tres puntos porcentuales menos que hace un mes y siete menos que hace dos.