La Organización Mundial de la Salud (OMS) notificó 566.000 nuevos casos de COVID-19 en la última jornada, que elevan el total global a 90 millones.

Los fallecidos ascienden a 1,94 millones, 9.300 de ellos registrados en las últimas 24 horas.

Las cifras diarias son ligeramente menores a las de los últimos días, en los que se llegaron a superar los 800.000 casos diarios y hubo un récord de más de 15.000 fallecimientos el pasado 9 de enero.

Tanto la gráfica de nuevos casos como la de muertes muestran un nuevo avance del coronavirus, tras cierta estabilización a finales de diciembre.

Por regiones, América roza los 40 millones de casos y Europa los 30 millones, mientras que el sur de Asia es la tercera zona más afectada con 12 millones de contagios.

Tanto en el continente americano como en el europeo se observa cierto repunte en los casos diarios con respecto a las cifras de diciembre, aunque el ascenso es más pronunciado en América que en Europa.

América acumula 925.000 muertos en la pandemia, Europa 634.000 y Asia Meridional 189.000, y en este caso la curva de fallecimientos diarios sigue estable en el continente europeo, pero en ascenso en el americano.

Estados Unidos suma 22 millones de casos, la India se mantiene en los 10 millones, Brasil en 8,1 millones y Rusia en 3,4 millones, siendo los cuatro países más afectados en casos absolutos.

Les sigue el Reino Unido con 3,1 millones de casos y una curva por fin en descenso, tras semanas de fuerte alza en los contagios diarios.

A continuación se sitúan Francia (2,7 millones de positivos), Italia (2,2 millones) y España (2,1 millones), con una curva en preocupante ascenso y que se acerca nuevamente a los máximos de infecciones diarias de noviembre.

Los pacientes recuperados en el planeta ascienden a 65 millones, y de los 25 millones de casos activos un 0,5 % (110.000) se encuentran en estado grave o crítico.