Alcaldes y portavoces socialistas de la provincia se han movilizado este viernes ante la Subdelegación del Gobierno en Granada para expresar su rechazo a la reforma de la Administración local que plantea el Gobierno y que "puede suponer el despido de más 5.000 trabajadores de los ayuntamientos por la liberalización de servicios y la privatización de sectores que pretende la nueva ley".

   Así lo ha advertido el vicesecretario general del PSOE de Granada, José Entrena, quien ha asegurado que el anteproyecto de ley promueve "claramente" en favor de la iniciativa privada el gran nicho de negocio que constituyen los servicios públicos de competencia municipal y de las comunidades autónomas.

   El dirigente socialista ha citado entre los sectores más afectados por la reforma los destinados a la promoción cultural, deportiva y del empleo en los municipios, entre otros, y ha denunciado que el desmantelamiento del sector público con esta nueva norma supondrá más de 250.000 despidos en toda España y más de 40.000 en Andalucía.

   El vicesecretario general del PSOE ha criticado además el "golpe" que supone la reforma para la autonomía y la democracia municipal. De hecho, ha precisado que el 77 por ciento de los municipios de esta provincia, en concreto los 130 con menos de 5.000 habitantes, podrían ser intervenidos por el Gobierno central si se aprueba la reforma en los términos en que está planteada en la actualidad.

   El dirigente socialista ha señalado además que los 160 municipios granadinos con menos de 20.000 habitantes, es decir el 95 por ciento del total de la provincia, "desaparecerán de hecho", ya que la ley los vacía de competencias y de servicios, que pasan a manos de la Diputación Provincial para poder así agruparlos, sacarlos a concurso y privatizarlos.

   Según Entrena, las modificaciones legales conducen a un modelo administrativo propio de la dictadura franquista, ya que se refuerza el papel de la Diputación Provincial. El vicesecretario general de los socialistas granadinos ha señalado además que la pérdida de competencias de los ayuntamientos será tal que el papel del gobierno municipal quedará limitado prácticamente a "tirar los cohetes en la feria y firmar los certificados de empadronamiento de los vecinos".

   Los alcaldes y representantes municipales socialistas de todas las comarcas que han participado en la concentración han entregado en mano al subdelegado del Gobierno, Santiago Pérez, un manifiesto en el que exigen la retirada de una reforma que, según afirman, "criminaliza la representación y el ejercicio político municipal con un falso debate sobre retribuciones y sueldos, y fulmina además el principio de rentabilidad social de los servicios públicos, sobre todo, aquellos que se prestan en municipios pequeños".

   "Los ciudadanos van a tener menos servicios, más caros y de peor calidad, nuestros gobiernos locales van a salir a concurso público en virtud de criterios económicos que serán fijados con nula sensibilidad social, sobre todo, para con los pequeños municipios, al grito de que cuesta mucho que los vecinos de un pueblo de menos de 5.000 habitantes tengan derecho a los mismos servicios que los habitantes de las grandes ciudades, plagadas de asesores con sueldos millonarios", señala el manifiesto.

   Además incide en que "este Gobierno, en vez de afrontar con valentía un debate territorial, de competencias y financiación, fía el futuro de nuestros pueblos y ciudades a los criterios del mercado, esas manos invisibles que se encargarán de recortar los servicios, imponer repagos y alejar del control ciudadano las decisiones del ámbito político. Esta reforma entrega en bandeja nuestros ayuntamientos a la especulación".