Un jurado popular ha declarado culpable al joven que ha sido juzgado desde este pasado lunes en la Audiencia Provincial acusado de matar a una anciana octogenaria estrangulándola en la vivienda que habitaba sola en Granada, cuando entró para robarle.
Los nueve miembros del jurado, que se habían retirado a deliberar este jueves por la mañana, han sido convocados a las 17,30 horas por el presidente del tribunal para dar a conocer su veredicto, que ha sido de culpabilidad, después de que el procesado, de 22 años y nacionalidad marroquí, reconociera los hechos en su declaración en el juicio.
La Sección Primera de la Audiencia de Granada deberá dictaminar ahora en su sentencia si los hechos son constitutivos de un delito de asesinato, como ha vuelto a calificarlos el fiscal, que pide por ello prisión permanente revisable, o de homicidio agravado, en la calificación de la defensa, ejercida por el letrado Andrés Jiménez Maldonado.
En el caso, visto pues para sentencia, el jurado considera probados los hechos, que se remontan al 20 de marzo de 2018, cuando el acusado se presentó en casa de la mujer, que entonces tenía 88 años. Según su propia versión de los hechos, no le abrió el portal y, cuando consiguió subir, la encontró en la puerta, tras lo que la empujó y la llevó, "consciente", al salón, donde la sentó, para robar en el domicilio.
Esto sucedió sobre las 12,00 horas, según el testimonio del acusado este pasado lunes en la Audiencia, y, desde las 9,00 horas aproximadamente, se había tomado una caja con "60 pastillas" de un potente ansiolítico.
"No sabía lo que hacía" pues las pastillas le hicieron "muy mal efecto", mantuvo el procesado, que reconoció que estranguló durante "tres o cinco segundos" a la anciana, cuando vio que iba a tocar el botón de teleasistencia. Ella le gritó y le estuvo "insultando", agregó, tras lo que pensó "que se había quedado dormida".
Le había ocasionado la muerte de forma instantánea, según precisó el fiscal en sus conclusiones. Aprovechó entonces para recoger dinero y joyas, y se fue "echando hostias", cerrando la casa con un juego de llaves que también se llevó.
En su derecho a la última palabra, este pasado miércoles, el acusado, el primero en la provincia enjuiciado con petición de pena de prisión permanente revisable, reiteró que no tuvo intención de matar a la anciana. Asimismo, se mostró arrepentido y pidió perdón a los familiares de la víctima y a los asistentes a la vista.
