En arte, lo caro y prestigioso se seguirá vendiendo igual en 2009, otra cosa serán los “valores mediáticos”, a los que la crisis afectará “casi seguro”, según los galeristas y expertos consultados por Efe, que creen además que la próxima edición de ARCO, que comenzará el 11 de febrero, será de nuevo un éxito.
En opinión de Guillermo de Osma, dueño de la galería del mismo nombre y presidente de ArteMadrid; Maribel Casillas, directora de Subastas Segre; Daniel Cardani, titular de la galería que lleva su nombre y presidente de la Asociación de Anticuarios de Madrid; y Juan de Muga, vicepresidente del Consorcio de Galerías de Arte y responsable de la galería catalana Joan Prats, el mercado del arte saldrá reforzado de la actual crisis económica.
Las galerías, explica De Osma, son “minipymes” muy vulnerables y artesanales pero que suelen funcionar sin pedirles a los bancos dinero para comprar cuadros, por eso, “en épocas de vacas gordas, guardan y en la de vacas flacas tiran de reservas”.
El comprador, aconseja, debe llevarse una obra porque le gusta, “eso es lo fundamental, y luego que valore otros aspectos. Si va a ser o no una magnífica inversión, eso, en principio, nadie lo puede garantizar”.
“El arte más contemporáneo será el más vulnerable a la crisis. Por ejemplo, el récord alcanzado en una subasta por Damian Hirst, con obras como un tiburón en formol, fue, cuando menos, dudoso”, porque, sospecha, quienes pujaron fueron sus propias galerías.
En ARCO, apunta, se vende entre el 10 y el 30% de todo lo que “se hace” en el año y él, al igual que el resto de consultados, cree que en 2009 se repetirá el éxito del año pasado.
Maribel Casillas opina que las casas de subastas “sufrirán unos porcentajes de lotes no vendidos muchísimo más elevados de lo habitual” e incluso reduzcan el número de pujas anuales.
No obstante, precisa, el arte siempre “ha sido, es y será una buena inversión” y, además, ofrece una ventaja añadida muy importante respecto a los otros sectores y es que una vez hecha la inversión ya no genera más gastos y sí aporta, además de los económicos, “beneficios evidentes como el prestigio social y cultural”, por eso saldrá “reforzado” de esta crisis económica.
Maribel Casillas piensa que serán los artistas que, por cuestión de modas, han quedado en los últimos 5 años en un segundo o tercer plano los que mejor aguantaran la crisis e incluso sus cotizaciones podrían subir, mientras que otros con los que se ha especulado más, como, por ejemplo, Bansky, acabarán notando la crisis y corrigiendo precios.
Daniel Cardani resalta que el mercado está expectante y que los coleccionistas, galeristas, marchantes, subastadores y artistas, han constatado que en las últimas grandes subastas internacionales se han registrado “mixed results”, es decir, se han retirado muchos lotes pero a la vez se han batido récords mundiales.
“Cabe esperar que los coleccionistas e inversores superen el pánico y vuelvan una vez más su mirada e interés al arte, que tradicionalmente se ha considerado un refugio seguro para el dinero, un placentero remedio anti-inflación”, desea Cardani, que matiza que esa reacción no será inmediata.
En general, detalla, la crisis, “y sobre todo la incertidumbre en el futuro económico y financiero lo enfría todo”, porque desaparece el optimismo, tan necesario cuando se van hacer compras de obras de arte pero es que también “se están corrigiendo los excesos cometidos en los años del esplendor económico”.
A Juan de Muga le parece que el valor añadido que tienen las obras de arte impedirá que el negocio de las galerías se vea afectado de forma importante.