Con 7 minutos, que se estrena el próximo viernes en doscientos cines españoles, Daniela Féjerman continúa adentrándose en el tema que ha protagonizado sus anteriores trabajos, las nuevas formas de relaciones sociales o familiares.
“Intento mirar el mundo que me rodea y pensar en él”, explicó ayer la directora en la presentación de su nueva película, un largometraje en el que se ha detenido a reflejar “las dificultades que encuentran las personas que están solas y que quieren dejar de estarlo” y cómo ha cambiado la búsqueda de la media naranja en la sociedad moderna.
Uno de estos mecanismos son las “citas rápidas” que algunas empresas de contactos organizan y en las que reúnen en una sesión a sus clientes para que, por turnos de siete minutos, se conozcan y determinen quién podría ser su pareja.
La idea de esta película surgió hace “tres o cuatro años”, cuando el productor Gerardo Herrero contó a Daniela Fejerman y a Ángeles González-Sidne la historia de una amiga suya que había acudido a una sesión de “citas rápidas”.
“Ángeles y yo fuimos a ver este fenómeno y nos pareció un buen punto de partida para hablar de lo difícil que es dejar de estar solo cuando uno no quiere estarlo”, contó Féjerman.