La tarde se tiñó de morado durante este día 8 de marzo reconociendo el valor de nuestras antepasadas y mirando hacia el futuro como un camino por delante a través del cual conquistar la igualdad. Tras la “Ruta por la Igualdad”, a la que asistieron más de medio centenar de personas en la cual tuvieron la oportunidad de conocer el legado de la mujer en la localidad de Rota profundizando en la historia del pueblo a través de la vida de esas nuestras antepasadas que formaron parte de ella, el 8M siguió dando motivos para reivindicar. Seguidamente, una vez finalizado el recorrido, le tocó el turno a las mujeres del ahora, independientemente de la edad, para hablar y clamar el por qué del 8 de marzo. 

En primer lugar, fue Gloria Muñoz, de la Asociación Roteña en Defensa de lo Público, la que tomó la palabra y expresó en su intervención la importancia de tener en cuenta también la voz de nuestras mayores. Una diferencia generacional en la cual reside la riqueza del feminismo. “Fuimos en los años 60, 70 u 80 rompiendo moldes y luchamos por eliminar el delito del adulterio, legalizamos los anticonceptivos, impulsamos la ley de divorcio…”. Una alavanza al camino en conjunto donde el trabajo de las mujeres pensionistas, señaló Gloria Muñoz, ha sido fundamental para entender los derechos de los que ahora gozan las mujeres. Se ha referido también a la violencia machista y a todas las formas de discriminación que atañen a las mujeres y concluyó con un alegato por la erradicación de la pobreza de las pensionistas. 

Seguidamente dos representantes de los colectivos feministas de la localidad más activos en la actualidad, Rosa Bustamante y Rosa Gatón, de la Asociación Mujeres Ante el Mundo y Mujeres Feministas de Rota, respectivamente, leyeron el manifiesto institucional consensuado por las Diputaciones provinciales. “Cuesta creer que haya quienes creen que hay igualdad. Cuando no se ven las desigualdades, cuando no se valoran las conquistas de los derechos laborales en favor de las mujeres, cuando las tareas laborales son consideradas como ayudas, cuando existen expresiones machistas, cuando parte de la realidad no es consciente…” ahí es cuando realmente es necesario este 8 marzo. Las mujeres son las que sufren más la pobreza energética ya que, por lo general,  los índices de pobreza les azotan más a ellas, apuntaron, por lo que, desde los colectivos roteños, llaman a la sociedad a “aunar esfuerzos con empeño los 365 días del año para que la igualdad sea una realidad” ya que es “cuestión de educación, democracia y justicia social”. 

Por último, la delegada de Igualdad, Luisa Fernández, cerró el sencillo acto recamando seguir reivindicando el espacio que aún queda por ocupar en la esfera pública y privada con nombre de mujer a través del feminismo “como respuesta” y finalizó con un rotundo llamamiento a la sociedad a seguir trabajando en igualdad para conseguir poco a poco logros que garanticen conseguir este objetivo: “La igualdad es el camino, no la meta”. 

Una vez finalizadas las intervenciones, miembros del equipo de gobierno y miembros de varias asociaciones sujetaron la pancarta por el Día de la Mujer con un firme y claro lema: “La igualdad es el camino, no la meta”.