El CD Rota se refuerza como líder tras sumar una nueva victoria, esta vez, por 4-1 ante el Puerto Real CF en casa. Desde que comenzó la temporada en Primera Andaluza, el equipo verderón no había disfrutado de un partido tan cómodo en todos los sentidos como el que disputó el pasado domingo en el Estadio Antonio Pazos Monago. Ya no solo en cuanto al marcador, que quedó resuelto antes del descanso con dos goles de Joselito Pérez y otro de José Rodríguez, sino por las sensaciones transmitidas por uno y otro equipo. Dos caras de una misma moneda. Dos estados de ánimo totalmente contrapuestos, cuya unión sobre el campo dio como resultado una auténtica apisonadora por parte del Rota, y una pesadilla sin final para los visitantes.
La intensidad, energía y derroche de los verderones, se encontró con el desánimo, la ineficacia y la apatía de los puertorrealeños que, sumidos en una crisis interna, cometieron demasiados errores. Algunos incluso impropios para un equipo que, hasta hace no mucho, fantaseaba con el ascenso a División de Honor. Muchos fallos en la salida y de concentración. Otros tantos para combinar con balón. No le duraba nada la posesión de la pelota, tampoco al Rota, aunque en su caso tampoco es que le hiciera falta. Con pocos toques era capaz de adentrarse por las bandas para plantarse delante de la portería de un Lito que, como el resto de sus compañeros, no tuvo su mejor día.
Antes de que muchos espectadores pudiesen incluso tomar asiento, Joselito Pérez ya había conseguido marcar. Primera acción de ataque y primer gol. José Rodríguez, antes del primer cuarto de hora, aumentó las distancias, mientras la numerosa grada poblada con aficionados del Puerto Real, la empezaba a tomar con el árbitro. Tampoco parecían estar demasiado conformes con el criterio impuesto por el colegiado los aficionados del Rota que vieron cómo, antes del descanso, la expulsión de Carmelo había ensombrecido una actuación brillante por parte de los verderones, pese a que su equipo estaba en ese momento tres por delante. Joselito Pérez había firmado, poco antes, su particular doblete.
Ahí se puede decir que acabó el partido. Pero la masacre para los visitantes parecía no tener fin. Nada más arrancar la reanudación, el enésimo momento de desconexión de la defensa verdiblanca estuvo a punto de confirmar un mal comienzo nuevamente por parte del Puerto Real. Le salvó el fallo de José Rodríguez, que no logró concretar entre los tres palos, aunque en la siguiente que tuvo no perdonó. Marcó el cuarto, prácticamente a placer ante la portería contraria para confirmar, aún más si cabía, una victoria que tuvo casi asegurada desde el inicio. Más aún cuando Iván Caballero, central del Puerto Real, fue expulsado en el lado de los visitantes, que estaban teniendo un día para olvidar. Y cuando las cosas van mal, no vienen solas. Ni siquiera fueron capaces de marcar desde el punto de penalti. Johan envió su lanzamiento raso pegado al palo, donde se encontró con la mano firme de un Alvarado absolutamente extraordinario. Con el trabajo hecho en ataque dese hace tiempo, el Rota iba camino de encadenar una nueva portería a cero como muestra de una defensa sólida que había cortado cada acción ofensiva de los de Juanma Carrillo. Pero, con el paso de los minutos, terminó bajando el ritmo hasta terminar concediendo. Samu marcó de cabeza un gol que los suyos ni siquiera festejaron.
Pese a que no pudo acabar con la portería imbatida, el Rota celebró una nueva victoria, la tercera consecutiva que le refuerza aún más como líder de una Primera Andaluza a la que ha vuelto con el mejor pie
