La alcaldesa de Rota, María Eva Corrales, ha dado detalle preguntada por la prensa, de la postura de los grupos políticos que componen el equipo de Gobierno y que estuvieron ayer representados en el Pleno de disolución de la Mancomunidad de Municipios del Bajo Guadalquivir, que supondrá que los Ayuntamientos que la conformaban asuman cada uno su parte de la deuda, que en el caso de Rota se calcula está en torno a los 5,5 millones de euros. La disolución se aprobó con el voto por mayoría de PSOE, IU y PA.

La primera edil ha explicado que tanto Partido Popular como Roteños Unidos, desde el grupo mixto en el que se encuentran también los independientes sanluqueños, decidieron abstenerse en las votaciones "por una cuestión de responsabilidad", aunque ha insistido en que siguen manteniendo su postura de no estar de acuerdo con la disolución y la liquidación "de la forma en la que se ha llevado a cabo por parte del grupo mayoritario, el PSOE, lo ha hecho, dejando en la calle a muchos padres de familia, renunciando a un empleo estable garantizado por la MMBG, dejando a deber muchísimo dinero a proveedores, y sin las cuentas claras". 

La alcaldesa ha explicado que no se tiene claro el montante total de la deuda, que se supone está en torno a los 50 millones de euros, pero ahí se incluirían también los intereses derivados de las sentencias judiciales que se ejecuten por los impagos, así como los intereses de los bancos. 

"Nos parecía un despropósito cerrar en falso un grano, sin saber si ese grano podría volver a abrirse y perjudicar aún más a los Ayuntamientos, que muchos de ellos ya estamos soportando situaciones difíciles, y que no se exigiese ninguna responsabilidad política a los que durante más de 30 años han tenido la potestar de gobernar, según unos estatutos hechos a medida, la MMBG", ha dicho Corrales, que ha recordado la tardanza en tomar posesión tras las elecciones municipales, y las dificultades para elegir a un nuevo presidente, en este caso presidenta, "cuando ya se adeudaban cinco nóminas a los trabajadores".

Para la alcaldesa, "este no es sino el reflejo de la nefasta gestión y del desgobierno de la MMBG", y ha recordado que desde Rota eran partidarios de hacer las cosas de forma más regulada para no hacer aumentar la deuda, como reduciendo la plantilla "sobredimensionada" de la MMBG, haciendo frente a los pagos a proveedores, o permitiendo que se finalizasen los cursos y escuelas taller en marcha, que en Rota en esos momentos eran tres, y que se han quedado sin terminar "dejando a alumnos y profesores en situación de desamparo absoluta".

La primera edil ha recordado que gracias a las alegaciones de los grupos del equipo de Gobierno y otros grupos "se consiguó que la Junta se hiciese cargo del sellado del vertedero de Utrera y Lebrija, y me consta que la presidenta está buscando líneas de financiación a través de la Junta y del Gobierno Central para ayudar a los Ayuntamientos a hacer frente a esta deuda".

"Lo que yo no sé es cómo vamos a explicarles a los roteños que vamos a tener en los presupuestos municipales más de cuatro millones de euros y que lo vamos a tener que pagar todos, pagando la nefasta gestión del grupo mayoritario en la MMBG, y el descalabro absoluto que se ha causado a muchas familias roteñas".