No hay dos sin tres y, como cabía esperar, el tercer día de celebración de Halloween en San Fernando o el día grande, al tratarse del 31 de octubre, volvió a registrar una expectación inusitada y miles de personas volvieron a salir a la calle para disfrutar de una fiesta americana que cada vez tiene más sabor cañaílla.
Ya sea por la amplia oferta del centro, donde el mundo de Harry Potter ha causado estragos, o en otras zonas de la ciudad como Camposoto o La Casería, el hervidero constante de personas ávidas de pasar una velada terrorífica no cesó.
A la espera de un balance oficial, lo que sí ha podido constatar este medio es que la Policía Local estimó que solo el pasado sábado, cuando se iniciaron las actividades, se juntaron en la zona centro un total de 30.000 personas.
Lo que está claro a estas alturas de la película es que es difícil poner un
pero a la fuerte apuesta municipal que en su día hizo el actual Gobierno local por consolidar a San Fernando como referente a nivel nacional de la celebración de Halloween. A nadie escapa que ya son muchas las personas de fuera, sobre todo del resto de la provincia, que no dudan en desplazarse para vivir en primera personas una experiencia casi única por la amplia oferta que se encuentra.
El próximo año habrá elecciones y habrá que esperar a ver qué pasa, pero lo que está claro es que Harry Potter ha puesto en esta edición y habrá que hacer auténticos malabares en 2023 para tratar de superarlo.
Además, Halloween 2022 también ha superado la prueba del tren-tranvía con el que se ha convivido en plena calle Real durante las jornadas de sábado y domingo sin incidencias a pesar del número público que en horario nocturno se ha dado cita en la céntrica vía isleña.