En todos los casos en los que ha habido cesión de centros hospitalarios desde el Ministerio de Defensa a las Comunidades Autónomas se ha tenido que reunir la Comisión de Transferencias. En el caso de la cesión completa y gratuita del Hospital de San Carlos a la Junta de Andalucía, el sistema no va a ser distinto, por lo que las declaraciones del presidente del Partido Popular de Cádiz, Antonio Sanz, sobre la innecesariedad de ese órgano serían incorrectas.
La respuesta a esta polémica política de hace un par de semanas llega desde los propios trabajadores del centro de San Fernando y se basa en los datos que han ido recabando sobre otras operaciones similares.
La portavoz de la Plataforma por el uso civil del Hospital General de la Defensa, Mercedes Morales, manifestó este miércoles sobre el particular que el caso que más se parece al de San Fernando es el de Cartagena y se tuvo que reunir la Comisión Mixta de Transferencias como es preceptivo y como defiende la Junta de Andalucía, que ha manifestado estar a la espera de que Defensa mueva ficha para empezar a poner sobre la mesa las condiciones. En el caso de Cartagena fue una negociación a tres bandas, toda vez que también participaba la Diputación Provincial.
Por que no hay que olvidarlo, lo que hay hasta ahora es una voluntad política de sentarse a negociar sobre la base de una cesión completa, incluido el suelo, pero queda mucho camino por recorrer hasta llegar a un acuerdo.
Mucha pana por cortar
Además del punto de partida que se estableció en los primeros días de marzo pasado, cuando Defensa aceptó la condición de ceder la titularidad a la Junta de Andalucía, queda mucha pana por cortar y todo apunta a que podría llegar el año 2014 y no estar todo atado y bien atado.
Es algo con lo que incluso cuentan los trabajadores del centro, habida cuenta de la complejidad de este tipo de procesos, y que esperan que si no hay acuerdo antes de fin de año se mantengan todos los servicios establecidos en el convenio de 2005, actualmente en vigor, hasta que ambas administraciones arreglen las cuentas.
De hecho, Morales destacaba que los servicios concertados se están cumpliendo perfectamente y así se seguirá haciendo, en tanto en el centro se ha realizado una auditoría, tanto de personal como de material existente en San Carlos, que será la base de la negociación y que esperan que Defensa le traslade a la Junta.
Esa auditoría es tan fundamental como inquietante para el Servicio Andaluz de Salud (SAS), ya que en varias conversaciones con este periódico se ha expresado el temor de lo que pueda contener, tanto de más como de menos.
Esto es, que lo mismo la titularidad del edificio no supone poner a disposición todo el instrumental que tiene San Carlos, que en algunos casos está a la vanguardia en sus respectivas especialidades, sino sólo la parte que no quieran trasladar a otros hospitales de Defensa que aún quedan en la red sanitaria del ministerio.
De la misma forma y dicho a modo de temor “razonable”, tampoco está claro -para la Junta, no así para Defensa que es la que ha hecho la auditoría y si aún no se la ha entregado a la consejería- qué personal es el que pretende traspasar a la comunidad autónoma. Y en ese caso no se esperan en Sevilla que Defensa sea cicatero, ni mucho menos.
Lejos de las polémicas políticas, los trabajadores siguen manifestándose cada miércoles a las puertas del centro. Y lo hacen precisamente porque son los que mejor saben que lo que queda puede desembocar en cualquier cosa. Aunque esperan que buena.
