La fragata Reina Sofía ha regresado este martes a la Base Naval de Rota, desde la que zarpó el pasado 18 de mayo, concluyendo un despliegue de más de cuatro meses integrada en la operación Sophia de lucha contra el tráfico ilegal de personas en aguas del Mediterráneo central.
Durante este tiempo, el buque de la Armada, integrado en la Fuerza Naval de la Unión Europea (EUNAVFOR MED), ha efectuado la interceptación de una embarcación con traficantes, deteniendo a dos de ellos. De igual forma, ha identificado a 51 posibles colaboradores de tráfico de personas y ha inutilizado 36 embarcaciones empleadas por los traficantes para transporte de los migrantes, con la intención de imposibilitar su reutilización.
En cuanto a las operaciones de salvamento, la Reina Sofía ha rescatado directamente a un total de 3.762 migrantes, de los cuales 3.194 eran hombres, 519 mujeres y 49 niños. Igualmente, ha cooperado en el rescate de otros 1.136 migrantes con buques que se encontraban en la zona. En estas operaciones se efectuaron un total de 329 asistencias médicas a los migrantes rescatados.
SOPHIA es una Operación multinacional liderada por la Unión Europea, según decisión del Consejo de la UE de 18 de mayo de 2015, que tiene como propósito luchar y quebrantar el modelo de negocio montado por las redes de contrabando y tráfico de seres humanos en el Mediterráneo, y contribuir a reducir las posibles pérdidas de vidas en la mar que se producen como consecuencia de la actividad de dichas redes.
Contando con las 4.898 personas que ha rescatado la fragata Reina Sofía, la operación Sophia lleva ya más de 26.000 migrantes rescatados en aguas del Mar de Libia.
Con la participación en esta misión, la Armada contribuye a construir la Seguridad y Defensa de España, que va más allá de sus fronteras y que empieza en países donde se genera inestabilidad.
La fragata Reina Sofía.
La fragata Reina Sofía (F-84), cuarta fragata de la clase Santa María, con una eslora de 138 metros y más de 4.000 toneladas de desplazamiento, está equipada con sensores y armas que le permiten desarrollar sus cometidos principales como buque de escolta oceánico.
Fue entregada a la Armada Española en 1989. Su base está en Rota, y su dotación la forman 203 personas, incluyendo la Unidad Aérea Embarcada de la Flotilla de Aeronaves y el Equipo Operativo de Seguridad de Infantería de Marina del Tercio de Armada, que ha regresado a base tras 133 días de despliegue.
