El uso del teléfono móvil constituye la principal causa de distracción al volante, según se desprende de la campaña de vigilancia para comprobar y asegurar que los conductores no comenten distracciones al volante que puso en marcha la Dirección General de Tráfico (DGT) entre los días 16 y 20 de septiembre en las carreteras de la provincia de Sevilla.
El subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano, ha explicado que sólo en una semana, en las carreteras de la provincia de Sevilla, 225 conductores han sido denunciados por los agentes de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil por cometer alguna distracción durante su conducción. En total, han sido controlados 6.945 vehículos de todo tipo (turismos, motos, furgonetas, camiones, autobuses…).
De las 225 denuncias impuestas, según Toscano, más de la mitad, 120 (el 53,3%) corresponden a la utilización manual del teléfono móvil. Diversos estudios constatan que el uso del teléfono móvil es un factor que multiplica por cuatro el riesgo de sufrir accidentes, y el riesgo que asume el conductor cuando habla por el teléfono mientras conduce puede ser equiparable a la conducción con excesos de alcohol.
Además de controlar el mal uso del teléfono móvil durante la conducción, los agentes también han vigilado que los conductores no manipularan el navegador u otros dispositivos mientras conducían, distracción equiparable a hablar por el teléfono móvil, o que no usaran auriculares durante la conducción. Por estos motivos no se han formulado denuncias durante esta campaña.
Consumo de alcohol y drogas
El consumo de alcohol y drogas en los conductores también ha sido objeto de control, y se ha prestado especial atención a las distracciones al volante como consecuencia de las conductas asociadas a la conducción bajo este tipo de sustancias. Así, durante la semana en la que se ha desarrollado la campaña de vigilancia, el 37,7% de las denuncias han sido asociadas a distracciones de conductores que circulaban bajo los efectos de estas sustancias.
Resultados del Informe Anual de Toxicología (2020), presentado por el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, informa que el 48,7% de los conductores fallecidos presentaron resultados positivos en sangre a drogas y/o psicofármacos y/o alcohol; asimismo, informa acerca de los peatones fallecidos que el 41,2% presentaron resultados positivos en sangre a drogas y/o psicofármacos y/o alcohol.
Otra de las consecuencias que se obtiene de la campaña desarrollada por la DGT es la constatación de que siguen existiendo conductores que no hacen uso del cinturón de seguridad o niños que no llevan un adecuado sistema de retención infantil. Por estos motivos, la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil formuló durante la semana de control un total de 4 denuncias (1,8%).
Las distracciones que se producen en el interior del vehículo también han sido controladas por los agentes, y entre ellas destacan distracciones comiendo, lectura de documentos por parte del conductor o distracciones con otros usuarios del vehículo. Estas distracciones han supuesto el 1,3% del total de denuncias.
La distracción en la conducción es la primera causa de los accidentes mortales de tráfico. En 2019, en España, la distracción aparece como factor concurrente en un 31% de los accidentes con víctimas mortales, con 319 fallecidos en ámbito DGT.
Colaboración de policías locales
Como viene siendo habitual en las campañas que desarrolla la DGT, la colaboración de las policías locales ha sido muy importante, ya que los controles de las distracciones se han realizado tanto en vías interurbanas como en urbanas.
Pese a que la campaña ha finalizado, los agentes de Tráfico de la Guardia Civil continuarán vigilando para evitar posibles distracciones de los usuarios que circulan por las carreteras.