La plena
implantación del teletrabajo puede
ahorrar hasta
165 horas anuales en desplazamientos al centro de trabajo, según un estudio realizado por
CCOO de Sevilla que ha sido presentado en la jornada ‘The labour market as a consequence of teleworking, challenges for full integration (telechain)’, celebrada en la
Universidad de Salento, en Lecce (Italia).
Así, el sindicato,
junto a la Universidad de Sevilla (US) ha participado en un
proyecto europeo que aborda la implantación del
trabajo remoto y evalúa cómo los
avances tecnológicos y la creciente
digitalización de la sociedad han permitido su expansión como una
opción viable para muchas personas trabajadoras y empresas.
El
secretario de Política Institucional de CCOO de Sevilla,
Jorge Carlos Lebrón, ha sido el encargado de presentar los resultados del estudio, basado en el
Plan Urbano de Movilidad Sostenible de Sevilla (PMUS), y que ha arrojado que, para un
trayecto medio de ida y vuelta de 15 kilómetros, el
tiempo medio ahorrado en los desplazamientos podría llegar hasta las
165 horas anuales: “Cuando se
implementa de manera efectiva, el teletrabajo ofrece
numerosos beneficios tanto para los empleados como para el medio ambiente.
Trabajar desde casa evita los largos y estresantes desplazamientos diarios hacia y desde la oficina,
reduciendo el estrés y mejorando el
equilibrio entre el trabajo y la vida personal”, ha señalado Lebrón.
CCOO ha hecho hincapié, eso sí, en que este método de trabajo “
ha provocado muchos cambios en la forma en la que se ven las
relaciones laborales, incluso en la acción diaria de las organizaciones sindicales o
incluso en cómo se elige la representación de las personas trabajadoras”. Y es que
la falta de contacto directo y físico entre los trabajadores puede
dificultar la
organización y comunicación sindical.
En este sentido, el secretario de Política Institucional de CCOO de Sevilla ha resaltado que “
las empresas tienen que negociar con los sindicatos la implantación del teletrabajo para asegurar que las personas trabajadoras
no perdamos derechos, que no tengamos que
costear con los
suministros de nuestro hogar lo que debe estar
a cargo de la empresa, no suframos
riesgos laborales en casa o que se garantice que este sistema no reste posibilidades a las
mujeres ni aumente las
brechas de género”.