La familia de la vecina de 22 años de Utrera (Sevilla)
presuntamente asesinada a manos de su expareja, un varón de 43 años en prisión provisional sin fianza por tales hechos, ha anunciado este miércoles que prevé solicitar entre
20 y 25 años de cárcel para el encartado, identificado como N.A.C.T, por un supuesto delito de
asesinato con alevosía, ensañamiento y la agravante de parentesco.
Después de que el Juzgado de Instrucción número 16 de Sevilla haya decretado el alzamiento del secreto de sumario que pesaba sobre las actuaciones, el abogado penalista
José Antonio Sires, que representa a la familia de la víctima, ha manifestado que de la investigación se desprende que el inculpado "golpeó severamente y en numerosas ocasiones" a su expareja "con
un objeto contundente en la cabeza y la espalda, sin darle posibilidad alguna de defenderse".
Por eso, ha señalado que prevé solicitar "la pena máxima" de entre 20 y 25 años de cárcel para el encartado, por un supuesto delito de asesinato con alevosía, ensañamiento y la agravante de parentesco.
PERMANECE EN PRISIÓN PROVISIONAL
Ello, después de que previamente, el Juzgado de Instrucción número dos de Utrera desestimase la petición cursada por la defensa del acusado, N.A.C.T, de 43 años de edad y de origen ecuatoriano, de obtener la libertad provisional, bajo la premisa de la necesidad de evitar la alteración, ocultación o destrucción relevante de pruebas.
En su comparecencia en el juzgado, el presunto autor del crimen se acogió a su derecho a no declarar ante el juez, como también había hecho ya en las dependencias de la Guardia Civil de Utrera. En paralelo, el cadáver de la víctima, V.R.A., de 22 años, fue
repatriado a su ciudad natal, Talolinga Nueva Guinea, en Nicaragua.
MOVIDO POR LOS CELOS
El abogado de la familia de la víctima apuntaba recientemente en declaraciones a los medios de comunicación que uno de los móviles que se barajan respecto al crimen es el de que el presunto autor de los hechos no admitiera la relación que su ex pareja había comenzado con otra persona, también de origen nicaragüense al igual que ella.
La víctima no había solicitado ayuda a los
servicios sociales del Ayuntamiento de Utrera en relación con presuntos malos tratos, tal como aseguraban fuentes municipales consultadas. Igualmente, tampoco constan denuncias suyas en el sistema VioGén, según fuentes de la Delegación del Gobierno en Andalucía.