Se trata de una experiencia única y emocionante para todo aquel que desee durante estos próximos meses visitar la Iglesia de Santa María la Blanca en Sevilla. Su retablo está en restauración y ofrecen la posibilidad a todo aquel que lo desee de poder ver de cerca cómo se trabaja en él.
Gracias a su párroco, Miguel Ángel Núñez este espectacular templo es un ejemplo constante de rehabilitación. “Desde el 2010, la iglesia está sometida a un examen constante por parte de arqueólogos, restauradores y arquitectos”, expresa Miguel Ángel.
Impone entrar en la nave central y admirar semejante tesoro del Barroco. Una impresionante yesería va abriendo paso a un espectacular retablo que ahora se encuentra en rehabilitación debido a que se conserva en muy mal estado. Dicha pieza data del año 1657 y fue realizada por Martín Moreno.
Un equipo de cinco restauradores dirigidos por José Joaquín Fijo y Almudena Fernández serán durante los ocho meses que tiene previsto que dure la restauración los encargados de llevarla a cabo.
En mitad de la nave central han dispuesto las distintas piezas del retablo, pues, aunque es algo bastante inusual, han tenido que desmontarlo para poder solucionar el principal problema que presentaba, sus anclajes a la pared. De esta forma, los restauradores trabajan in situ, ante la mirada de todo aquel que quiera visitar esta joya barroca.
Además, una de las curiosidades es que las labores de desmontaje han deparado algunas sorpresas, apareciendo una gran cantidad de papeles, algunos de ellos muy curiosos.
El horario de visita es de 11,30 a 13,00 y de 17,00 a 20,00 horas. Las tareas de restauración tienen un coste bastante elevado por lo que por un donativo de dos euros se puede acceder al templo.
Quedan varios meses de duro y emocionante trabajo por delante, pero la oportunidad de ver una restauración en vivo hace que sea una experiencia irrepetible. Su párroco espera que el próximo 5 de agosto, día de Nuestra Señora de las Nieves, la Virgen de las Nieves vuelva a subir a su renovado altar.