La Guardia Civil del municipio sevillano de Lora del Río  ha detenido a 7 personas e investiga a otra en el marco de una organización criminal dedicada a la venta de drogas, principalmente en este municipio y en las localidades de Constantina, Peñaflor, La Campana y El Priorato.

La operación, denominada 'Batalla 1571', es la segunda fase de la operación 'Capoli', en la que se realizaron 23 detenciones.

Las investigaciones se iniciaron hace unos cinco meses tras detectarse en Lora un clan familiar que operaba como una organización criminal, teniendo como actividad principal la venta de sustancias estupefacientes.

Según las investigaciones, ejercía como líder una mujer de la familia, teniendo como colaboradores principales a personas encargadas de distribuir la droga, entre ellos menores de edad.

El 'modus operandi' utilizado para la distribución de esas sustancias ilícitas era el conocido como 'telecoca', de tal forma que los distribuidores concertaban previamente con los consumidores un lugar para la venta, consiguiendo con ello realizar la transacción con la mayor celeridad posible, evitando así una posible acción policial sobre ellos.

Existían dos puntos de venta fijos, a los que acudían los consumidores para la obtención de esas sustancias, que funcionaban como fumaderos de heroína.; uno de ellos en las inmediaciones de un colegio público de Lora del Río.

La organización recurría a amenazar a sus colaboradores para mantener la disciplina y el cumplimiento de sus roles. A veces aplicaban violencia con otros clanes, llegando a registrarse reyertas en la vía pública con exhibición y uso de armas de fuego, coincidiendo con la salida de menores del colegio público.

Como consecuencia de varios registros domiciliarios, los agentes se han aprehendido distintas sustancias estupefacientes, como cocaína, heroína, hachís, así como sustancia de corte, una báscula de precisión, útiles para la elaboración, preparación y dosificación.

Se ha intervenido una plantación de marihuana que se hallaba en el interior de una de las viviendas, dinero en efectivo, terminales móviles, un arma corta de aire comprimido, una carabina, varias navajas y machetes, cámaras de vigilancia, y un vehículo.

Con ocasión de los registros practicados, con técnicos especialistas, se ha acreditado que dos de las viviendas implicadas estaban conectadas de forma ilegal a la red eléctrica, por lo que se instruyeron diligencias por delito de defraudación de fluido eléctrico.