El Real Mallorca (1-2) venció después de tres meses de "sequía" y su técnico, Joaquín Caparrós, tomó "oxígeno" a costa de su "eterno" rival, el Real Betis, en un partido en el que los baleares despiden el año de la mejor manera.
El Betis desaprovechó una magnífica ocasión para estar en el cuarteto de cabeza en un partido en el que pudo golear en los primeros cuarenta y cinco minutos, con un mejor juego y claras ocasiones ante un rival cohibido.
No fue así y al final lo pagó con una derrota que deja un sabor "amargo" a su afición que, no obstante, apoyó a su equipo en todo momento y despidió al colegiado con una sonora pita por su actuación, sobre todo en la jugada del segundo gol mallorquín, por un penalti que los jugadores béticos protestaron al estimar que la falta se produjo fuera del área.
Pudo el Betis dejar resuelto el partido en los primeros 45 minutos, en donde fue muy superior a un Real Mallorca con pocos argumentos y que pareció atemorizado.
Así, el equipo que dirige Pepe Mel, tras inaugurar el marcador en el minuto 5, por medio de Beñat, en el lanzamiento de una falta, que rozó Mario, dispuso de ocasiones tan nítidas que lo más difícil era errarlas.
El ariete Jorge Molina (m.13), a tres metros de la portería, y a medido centro de Rubén Castro, remató al aire; Campbell (m.20), en remate de cabeza, mandó el esférico junto al poste izquierdo del marco de Aouate; y Beñat (m.22), en una gran jugada de ataque del Betis, con pared con Rubén Castro, lanzó junto al poste derecho mallorquín.
"Perdonó" el Betis tanto que el Mallorca supo rentabilizar sus opciones y en una de las escasas aproximaciones ante Adrián, un centro de Kevin fue rematado de cabeza perfectamente por Víctor Casadesús para llevar la igualada (m.30) al electrónico .
Pareció acusar el Betis el mazazo en su ánimo, porque ya no tuvo el ritmo de antes del empate. No obstante, en el ocaso del primer periodo tuvo algunas opciones, la más clara la de Cañas (m.44) en lanzamiento desde fuera del área que Aouate se encargó de desbaratar al desviar a córner.
En la segunda mitad llegó el tempranero gol del Mallorca, el 1-2, en una acción de Mario al borde del área, que desquició el juego de los béticos que fueron mucho más erráticos y sin la creatividad del primer periodo.
No obstante, en la recta final, el Betis puso en aprietos el marco de Aouate pero el guardameta balear evitó que su equipo perdiera su preciado "botín".