El Pabellón Real de la capital hispalense es el espacio elegido, finalmente, para albergar la colección Bellver después de más de 15 años de negociaciones y de idas y venidas que a punto estuvieron de alejar el legado del mecenas bilbaíno de la ciudad.
Empeñado en que la obra que ha ido atesorando a lo largo de su vida tuviese un espacio museístico propio, Mariano Bellver, nacido en Vizcaya pero afincado en la capital hispalense, ha llegado a un acuerdo con el Ayuntamiento para que la exposición pueda ser una realidad y cederá su colección de forma gratuita y “sin el menor interés económico” al patrimonio público de la ciudad. Además, Bellver ha arrancado al alcalde, Juan Ignacio Zoido, el compromiso de que la obra pueda ser visitable antes del 5 de diciembre de 2016, coincidiendo con la fecha de su noventa cumpleaños.
Después de que ayer ambas partes firmaran un protocolo de intenciones, que deberá de ser materializado mediante un convenio, el alcalde señaló que este mismo viernes el Ayuntamiento comenzará a redactar el anteproyecto y después el proyecto, para que las obras de acondicionamiento y musealización del Pabellón Real (legado de la exposición iberoamericana de 1929) comiencen lo antes posible y siempre con la colaboración del coleccionista, que siempre puso como condición que toda su obra se exhibiese en conjunto y no fuera separada. Esta condición ha sido al que ha retrasado y complicó la negociación durante estos últimos 15 años.
Ahora, y tras llegar al acuerdo con el Consistorio hispalense, Bellver manifestó ayer ser consciente de que, dado el volumen de las piezas de su colección (943 obras), el Pabellón Real “es pequeño para albergarla entera” por lo que se ha asegurado de que el conjunto permanezca unido mediante la rotación de las piezas todos los años y de que haya espacio suficiente en los sótanos para que permanezca el resto.
“No va a caber todo. Lo mejor va al museo, iremos rotando algunas piezas y si hay alguna cosa que no se pueda poner, nos la quedaremos mi señora y yo en mi casa”, señaló al respecto Bellver, que explicó que cede a la ciudad de forma gratuíta su colección para corresponder “al trato y a la acogida” que los sevillanos siempre han mostrado a su familia.
943 piezas
La colección de Bellver cuenta con 943 obras de arte catalogadas por catedráticos y profesores de historia del arte y abarca desde el siglo XVI al XXI, de las que 364 son pinturas y el resto está compuesto por 38 esculturas de madera, 19 esculturas de mármol, 156 piezas de cerámica y porcelana, 87 piezas de orfebrería y 105 piezas de mobiliario. La cronología de la colección comienza en el siglo XVI y llega hasta la presente centuria, aunque como es sabido, “abundan las piezas relacionadas con la temática costumbrista sevillana”.
Las piezas serán expuestas en el Pabellón Real, construido según el diseño del arquitecto sevillano Aníbal González y ubicado entre la plaza de América y el parque de María Luisa. El edificio, que perteneciente al Ayuntamiento, actualmete es utilizado para albergar unidades administrativas.
Aún no hay presupuesto definido para el proyecto
El alcalde hispalense, Juan Ignacio Zoido explicó ayer que el Ayuntamiento ya tenía previsto reacondicionar el Pabellón Real, de propiedad municipal, y que actualmente se usa con fines administrativos.
Para estas obras había destinados entre 600.000 y 800.000 euros, aunque ahora, para que el espacio pueda ser musealizado y se pueda exponer la colección de Mariano Bellver, el proyecto requerirá de una mayor inversión. “Vamos a redactar inmediatamente el anteproyecto y, a partir de ahí, haremos el proyecto y consignaremos las cantidades”, señaló Zoido al respecto, al tiempo que añadió que el Ayuntamiento va a “hacer un esfuerzo” para que el museo sea “una auténtica realidad” y esté listo para antes de finales de diciembre de 2016.