Las doce escuelas de verano de la provincia de Sevilla atienden este año a 955 menores, 255 más que en 2014. Nueve de estas escuelas están en Sevilla capital, una más que el año pasado, y las otras tres están en Pilas, San Juan de Aznalfarache y Dos Hermanas. El periodo de actividad de las diferentes escuelas de verano va desde el 1 de julio hasta el 31 de agosto.
Según un comunicado, la Delegación Territorial de Igualdad, Salud y Políticas Sociales de la Junta en Sevilla explica que subvenciona con un total de 250.000 euros esta actividad destinada a atender a menores en situación de riesgo de exclusión social.
Las escuelas de verano de Sevilla capital atienden a 755 niños y están ubicadas dos en Torreblanca, dos en el Vacie, dos en el Polígono Sur, una en Tres Barrios-Amate y otra en el Polígono Norte. La escuela de verano de Dos Hermanas está en el barrio Cerro Blanco y atiende a 75 menores, la de Pilas acoge a 15 niños en la barriada San José, y la de San Juan de Aznalfarache, en la barriada Santa Isabel, atiende a 90 menores.
Este programa de escuelas de verano es posible por la colaboración de nueve entidades ciudadanas, Unión Romaní, Rutas de Sevilla, Anima Vitae, Aliento, Entre Amigos, Misión Urbana, Alborada, Akherdi y Asamblea Cooperación por la Paz. Con ello, las entidades organizadoras de estas actividades cumplirán una doble labor, por un lado, llevar a cabo acciones socioeducativas enfocadas a los menores con el objetivo de dar continuidad y complementar su formación una vez concluido el curso escolar y, por otro lado, ofrecer un servicio de comedor que garantice las necesidades básicas alimenticias del colectivo a través de la distribución de tres comidas diarias. Esta segunda labor es una de las diferentes iniciativas incluidas en el Decreto Ley de Inclusión a través del Empleo y Medidas Extraordinarias de Solidaridad de la Junta de Andalucía.
Además de la inclusión de un servicio diario de comedor, las escuelas de verano, comprenden la práctica de un amplio abanico de actividades formativas, culturales y lúdicas encaminadas a reforzar el proceso educativo de niños con necesidades especiales, así como a fomentar alternativas para el uso adecuado del tiempo libre vacacional y trabajar valores como la solidaridad, amistad, responsabilidad, confianza o el respeto hacia los demás. De esta labor se ocupa un equipo técnico de monitores especializados.
LUCHA CONTRA LA EXCLUSIÓN SOCIAL
Uno de los principales ejes del Decreto Ley de Inclusión a través del Empleo y Medidas Extraordinarias de Solidaridad es el Plan Extraordinario de Solidaridad y Garantía Alimentaria de Andalucía, del que forma parte esta iniciativa de utilizar las escuelas de verano como herramienta para seguir dando respuesta tras la conclusión del curso escolar a las carencias alimenticias de menores de zonas de transformación social.
Este Plan de Garantía Alimentaria dotado con 5,3 millones de euros permite el refuerzo en la alimentación infantil, con tres comidas en los colegios públicos de Educación Infantil y Primaria y las escuelas de verano para el período vacacional; el refuerzo del Programa Bonificado del Servicio de Comedor de los Centros de Participación Activa, y el catering a domicilio para mayores.