La Consejería de Fomento y Vivienda ha sacado a licitación, con un presupuesto de 1,56 millones de euros y un plazo de ejecución de seis meses, las obras para la construcción de la pasarela ciclista sobre la SE-30, que comenzarán "antes de final de año".

La licitación ha sido publicada este jueves en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA) y supone "un paso más para el inicio de las obras, que será antes de final de año, mientras que su conclusión se prevé para "antes del verano de 2017", según ha informado la Consejería en una nota.

El departamento que dirige Felipe López ha resaltado que esta actuación permitirá la construcción de una infraestructura ciclopeatonal sobre la circunvalación de Sevilla, a la altura de Tablada, que permitirá enlazar el carril bici ya existente a través del puente de hierro de San Juan de Aznalfarache con la malla ciclista de la capital, comunicando así el Aljarafe con la ciudad e integrándose también en la red ciclista del área metropolitana.

De esta forma se dotará de una conexión no motorizada entre ambos núcleos urbanos, recuperando así una vía tradicional de comunicación para ciclistas y peatones que fue cortada en 1992 por la construcción de la SE-30, añade la Junta.

La pasarela permitirá, de esta forma, conectar "de forma rápida y segura" en bicicleta los apenas dos kilómetros que separan el Barrio Bajo de San Juan con la red ciclista de la capital. La actuación intervendrá en una longitud total de 400 metros, desde el carril ya existente al finalizar el antiguo Puente de Hierro (San Juan) hasta Tablada (Sevilla).

De este recorrido, 170 metros corresponden a la pasarela en sí, mientras que el resto son tramos de carril bici. Para dotarla de mayor seguridad, la intervención incluirá la instalación de una red de alumbrado a lo largo de toda la vía ciclopeatonal con tecnología LED.

La pasarela dispondrá igualmente de un vano central que salva la ronda de circunvalación de 58 metros entre las pilas. La plataforma cuenta con dos rampas de acceso de hormigón armado de un ocho por ciento máximo de pendiente para facilitar la accesibilidad a ciclistas y personas con movilidad reducida.

Según explica la Junta, estas estructuras tendrán un trazado en curva para salvar la complejidad que supone encajar la infraestructura en el espacio disponible, adecuándose así a los requisitos de alzado --5,5 metros sobre la SE-30-- acordados con el Ministerio de Fomento.

Además, la ejecución de las obras afectará "lo menos posible a los arcenes o calzadas para evitar incidencias al denso tráfico que registra a diario la SE-30". Por ello, la estructura metálica será fabricada en taller para ensamblar posteriormente, 'in situ', primero las rampas de acceso laterales y al final la rampa central.

Dotada con fondos europeos correspondientes al nuevo marco Feder 2014-2020, el nuevo proyecto "aprovecha al máximo toda la obra ejecutada en la versión inicial, especialmente las cimentaciones", según concluye la Consejería de Fomento y Vivienda.