Los padres y madres de alumnos de los centros públicos de educación están llamados el próximo fin de semana a la segunda jornada de la “huelga de deberes”, convocada por la Confederación Española de Asociaciones de Padres de Alumnos.

Una acción que generó una polémica “equivocada” --cuestionada incluso por el Ministro de Educación--, a juicio de la presidenta de la Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos de Sevilla (FAMPA), María Alonso, quien aclaró este jueves en el programa La Entrevista de Ondaluz Sevilla TV que “no queremos que se prohíban los deberes, ni estamos en contra del profesorado ni de su profesionalidad, tareas sí pero que se racionalicen”.

Según una reciente encuesta elaborada con propia FAMPA, el 62% de las asociaciones denuncia que se están imponiendo deberes a edades cada vez más tempranas y siguiendo un modelo demasiado “tradicional” y que, en opinión de su presidenta, “no tiene en cuenta a las familias que tenemos hoy en día”.

Frente a eso, las asociaciones de madres y padres de los centros educativos públicos de Sevilla piden “otros deberes”, que provengan de otro tipo de escuela para que fomenten la innovación, la creatividad, con recursos para poder hacer uso de las nuevas tecnologías; unos deberes –explicó María Alonso—que tengan en cuenta el horario no lectivo para que los niños lo dediquen al juego y al ocio”.

En definitiva, tanto la presidenta de FAMPA como la tesorera de la entidad, Soledad Campos, defendieron la necesidad de un nuevo modelo educativo, basado en la colaboración permanente de la comunidad docente con los padres y madres, aunque pusieron en duda que ese cambio de modelo educativo pueda producirse con el actual gobierno porque “se nos habla de pacto político pero el ministro dice que la LOMCE no se toca”.

En cuanto al modelo andaluz, desde FAMPA reconocen que Andalucía es un referente en aspectos concretos como la gratuidad de libros de texto, las becas de comedor o el transporte escolar, “pero hace falta más”. Y entre sus reivindicaciones figura la necesidad de que se recupere la figura del conserje de tarde que haga efectivo el plan de apertura de centros.