El delegado de Movilidad y Seguridad del Ayuntamiento, Juan Carlos Cabrera, instó la semana pasada a la empresa de vehículos concertados Cabify a realizar su actividad de “manera discreta” y a mantener sus coches lejos de las zonas de influencia de los taxistas (las de grandes aglomeraciones ciudadanas). Estas fueron las indicaciones que, a modo de instrucciones, ofreció Cabrera a la empresa de coches de alquiler con conductor y a otros empresarios de transportes con licencia VTC durante la reunión que se celebró el viernes, junto con las asociaciones mayoritarias del taxi, para acabar con el conflicto originado entre ambas partes.
El supuesto “intrusismo” de los vehículos concertados centró las más de dos horas de la reunión en la que el Consistorio anunció sus medidas (unidad policial específica para el aeropuerto y Santa Justa y refuerzo del SETI) y tras la que Cabrera arrancó a Cabify el "compromiso” de no actuar en las zonas de influencia de los taxistas y a no circular por la ciudad en busca de clientes. “Accedimos porque no queremos entrar en batalla y porque parte de lo solicitado (lo de no buscar clientes en tránsito) entra en las obligaciones que nos marca la ley”, señaló a
Viva Sevilla uno de los representantes de Cabify presentes en la reunión, que añadió que lo que pretende el Consistorio es que “no promovamos nuestra actividad, ya que para los taxistas todo es intrusismo”.
“En lo que ellos denominan zona de influencia entrarían todos los lugares de aglomeraciones ciudadanas tales como las salidas de bares, teatros, discotecas, aeropuerto o Santa Justa, pero eso no es lo que marca nuestra normativa (la Ley de Ordenación de Transportes Terrestres LOTT, que es estatal, aunque las comunidades autónomas son quienes conceden las licencias)”, indicó.
Ateniéndose a la normativa de la LOTT, a la que se introdujeron modificaciones en 2015 precisamente para regular el servicio de vehículos con licencia VTC y para delimitarlo del prestado por los taxis, este tipo de empresas con vehículos concertados como la de Cabify (en Sevilla hay otras como Autos Tabares, AutoHíspalis, o autos con chófer michofer.es) tienen derecho a operar por todo el área de la ciudad, incluidas las zonas de aglomeraciones, aeropuertos y estaciones. De hecho, tanto en la estación de Santa Justa como en San Pablo hay áreas delimitadas específicamente para ellos (en el primer caso una placa indica la reserva de dos plazas y en el aeropuerto hay 20 estacionamientos reservados en el parking T1 para estos vehículos).
Cabify, que llegó a Sevilla en septiembre del año pasado, ha mostrado su intención de seguir realizando su actividad “de la misma manera que siempre” e incluso ampliar su flota. “Nuestro trabajo es legal, existe mucha desinformación”, finalizaron.