La ciudad de Sevilla hará "estables" las medidas de seguridad y movilidad que se planifican para los grandes eventos, como pueden ser las Fiestas de Primavera o la Navidad, como prevención ante posibles atentados, además de incrementar la formación antiterrorista de la Policía Local y participar activamente en los planes contra la radicalización violenta.
La junta local de seguridad de la ciudad de Sevilla ha decidido dar estabilidad a la planificación de seguridad y movilidad que ya se realiza ante grandes eventos, como pueda ser la Semana Santa, la Feria o la Navidad, y establecer un primer perímetro de seguridad, que afectarán principalmente al entorno de los monumentos Patrimonio de la Humanidad (Catedral, Alcázar y Archivo de Indias), la Puerta de Jerez, zonas peatonales y comerciales, así como otras de especial sensibilidad.
Además, se contempla el establecimiento de un nuevo plan de videovigilancia, controles conjuntos entre Policía Nacional y Local, el reforzamiento de la presencia de agentes, un incremento de la formación de la Policía Local en materia de lucha antiterrorista y la implicación en las medidas contra la radicalización violenta y yihadismo, más enfocadas hacia la población en general, incluyendo campañas contra la islamofobia.
Según el alcalde de Sevilla, Juan Espadas, estas medidas se complementarán con el establecimiento de planes de movilidad específica en ciertas zonas, como es el caso del Casco Histórico, que garanticen la compatibilidad de la seguridad con los servicios municipales, de emergencia o la vida cotidiana, como es el acceso de los residentes o la carga y descarga, que comenzarán con la regulación de la movilidad en Mateos Gago y la calle Alemanes pero que se extenderá a otras zonas. “En la coordinación de esos usos está la clave”, ha señalado.
Además de estas medidas, Espadas ha adelantado que se tomarán otras de carácter presupuestario y que al próximo Pleno llevará una modificación presupuestaria para que antes de que finalice el año pueda ampliarse la plantilla de la Policía Local. Ha insistido en la importancia de que se “levanten las restricciones” que impiden al Ayuntamiento reforzar los servicios públicos para atender este incremento de seguridad, un guante que el delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, ha recogido apuntando que ya se ha abordado en la reunión entre el Ministerio del Interior y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y que la “voluntad existe”, aunque puntualizando que hay que “planificar las cosas adecuadamente”.
El alcalde no ha querido cifrar el coste económico que supondrá este incremento de la seguridad, ha recordado que los maceteros que hasta ahora se han instalado “los teníamos en el almacén municipal” y no ha supuesto ningún coste, y que la voluntad de Sevilla es “no escatimar recursos propios para garantizar la seguridad”, aunque sí se necesita una cobertura legal y jurídica para incrementarlas. El portavoz municipal del PP, Beltrán Pérez, ya ha garantizado el apoyo de su grupo a “cualquier medida” que garantice “un entorno de convivencia equilibrada”.
Sobre los perímetros de seguridad por zonas que se están planteando, Espadas se ha remitido a los diferentes planes de movilidad que se están analizando, especialmente para “poner cordura a los horarios y las zonas de carga y descarga”, que afectarán tanto al entorno monumental de la Catedral, como a zonas peatonales y comerciales. Además, ha adelantado que se estudiará la modificación de algunos de los elementos físicos que se han instalado como barreras preventivas para adecuarlos a la estética del entorno, coste que se estudiará en su momento.
El delegado del Gobierno en Andalucía, por su parte, ha destacado la importancia de la colaboración, coordinación y lealtad con que Sevilla ha abordado las medidas antiterroristas desde que se reforzó el estado de alerta 4, apuntando que, además del reforzamiento de los medios humanos y físicos, hay que abordar la estrategia policial “desde la complementariedad, con patrullas y controles conjuntos”. También ha querido destacar la importancia de que los ayuntamientos se sumen al plan de lucha contra la radicalización, ya que los servicios municipales “están en cada rincón de la ciudad”.
“La seguridad ya es una estrategia colectiva e integral. Ya sólo cabe trabajar de manera conjunta en la prevención y tener capacidad de reacción”, señalaba Antonio Sanz.