La sociedad Puerto de Cuba en Liébana SL, antigua inquilina de la terraza de copas junto al río Guadalquivir, ha reclamado este lunes a Río Grande, complejo hostelero propiedad ahora del empresario Miguel Gallego, que "cumpla la sentencia" y proceda a la "devolución inmediata de la legítima posesión de las instalaciones".
Los responsables de Puerto de Cuba aluden al fallo judicial, publicado íntegramente por Viva Sevilla el pasado jueves, que ordena a Río Grande a devolverles la zona de la terraza y los jardines del local de copas que ocuparon durante casi 14 años como arrendatarios de dichos espacios.
"Queremos mostrar nuestra satisfacción por el hecho de que haya quedado claramente desmotrado que (Puerto de Cuba en Líebana SL) ostentaba la legítima posesión de las instalaciones de Río Grande, de las que fue desalojada y despojada de manera ilícita, como siempre defendió y como acredita rotundamente el fallo judicial", han afirmado en un comunicado remitido a este periódico.
"Sentencia contundente"
Los demandantes inciden en que es "inadmisible" que fuesen desalojados de las instalaciones, "adquiridas por Gallego encontrándose vigente el arrendamiento a favor de Puerto de Cuba en Liébana SL". "La sentencia es contundente en cuanto a que (las empresas de Gallego) obraron de mala fe, pues expresamente dice (la sentencia) que no pueden considerarse adquirientes de buena fe, dado que en el juicio ha quedado acreditado suficientemente que conocían la existencia del arrendamiento", han añadido.
Puerto de Cuba insiste en censurar a Gallego por su "nulo respeto a las resoluciones judiciales, evidenciado con sus propios actos, ya que el mismo día en el que le fue notificada la sentencia, no tuvo ningún reparo en abrir al público la terraza que ocupa ilícitamente tras el desalojo", en un claro intento, según manifiesta la soeciedad, de "dilatar injustificadamente la reposición de las instalaciones al estado en que se encontraban antes del desalojo, así como su inmediata devolución".
