El Juzgado de lo Penal número 10 de Sevilla ha acogido este jueves una nueva sesión del juicio por la presunta filtración denunciada en las oposiciones promovidas por el Ayuntamiento hispalense para cubrir 103 plazas de la Policía Local, compareciendo como acusados 14 opositores, quienes han negado que tuviesen acceso previo al contenido de las pruebas o que conociesen personalmente a los miembros del tribunal, entre otros aspectos. Además, dos de ellos han apuntando presiones de un agente del extinto Grupo Especial (Gepol) para que denunciasen al tribunal de las oposiciones.
Durante esta nueva sesión del juicio, que gira en torno a la presunta filtración de los exámenes de las dos oposiciones promovidas en 2012 por el Ayuntamiento para cubrir 47 y 56 plazas de agente de Policía Local, los 14 últimos opositores que han comparecido ante el tribunal como acusados se han negado a responder a las preguntas de la fiscal o de la acusación particular, contestando exclusivamente a sus abogados defensores.
Al respecto, recordemos que la Fiscalía encuadra la presunta filtración de los exámenes en un intento de algunos de los miembros de los tribunales de favorecer a "determinados aspirantes por razones de amistad o vínculos "familiares o sindicales", toda vez que en este juicio hay 45 acusados entre los que figuran 37 policías locales que lograron una plaza en el cuerpo meced a dichas oposiciones, tratándose uno de ellos del hijo de Manuel Bustelo, presidente del Sindicato Profesional de Policías Municipales de España (Sppme) en Sevilla.
Entre los acusados figuran también personas que formaban parte de los tribunales constituidos para estas dos oposiciones, como el dirigente local del Sppme Manuel Baso y el superintendente de la Policía Local, Juan José García.
En todos los casos, los opositores que han comparecido este jueves como acusados han negado que antes de los correspondientes exámenes contasen con el contenido de los mismos o con su plantilla de corrección, que conociesen a alguien que tuviese en su poder dicho documento o que conociesen de modo personal a alguno de los miembros de los tribunales conformados para evaluar las pruebas.
De otro lado, abogados presentes en la Sala han explicado a Europa Press que dos de los acusados han declarado cómo un agente de la Gepol contactó con ellos durante el año 2012 para que denunciaran al tribunal de las oposiciones, quedando incluso con uno de los opositores que han declarado hasta dos veces --en agosto y antes de noviembre-- en sendos bares de la capital, antes de iniciarse esta investigación judicial.
En este sentido, este acusado ha indicado que la segunda vez el agente de la Gepol le vino a decir que si no colaboraba "ya se verían y que la conversación no había existido". Al hilo de esto, el abogado de este opositor ha pedido al juez un careo con el agente de la Gepol, petición rechazada por el tribunal.
Otro de los declarantes este jueves ha lamentado que "después de siete años estudiando" se vea imputado en este proceso, asegurando que no conoce a nadie dentro de la Policía Local ni tiene familiares en el cuerpo.
De otro lado durante la sesión de este jueves se ha mostrado una carta dirigida la Junta sobre otras oposiciones de la comunidad en la que "denunciaba" que había opositores familiares de agentes y que si aprobaban lo denunciarían. Lo que demuestra, según las defensas, que "estas maniobras estaban extendidas" y que la denuncia sobre la presunta filtración en Sevilla estaba "preparada de antemano".
Tras terminar las declaraciones de los acusados, el próximo martes comenzará la fase testifical con la comparecencia de cinco testigos, entre ellos el presidente de la Junta de Personal del Ayuntamiento de Sevilla y el jefe de estudios de la Escuela de Seguridad Pública de Andalucía (ESPA), Isidoro Beneroso.