El portavoz municipal de Izquierda Unida, Daniel González Rojas, ha anunciado este domingo que su formación política va a presentar una batería de enmiendas al proyecto de ordenanzas fiscales elaborado por el gobierno de Juan Espadas (PSOE) para 2019, a fin de lograr una “mayor progresividad” en los tributos e impuestos y construir así “una ciudad más justa e igualitaria dentro del poco margen de maniobra que nos ha dejado el alcalde”.
Para avanzar en esta dirección IU se marca como prioridad aumentar los ingresos municipales a través de diversas medidas encaminadas a mejorar y reforzar los servicios públicos que el Ayuntamiento presta a las y los ciudadanos. Así, por ejemplo, la formación de izquierdas aboga por aplicar un recargo en el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) a las viviendas vacías, ahora que el Tribunal Constitucional ha levantado el veto a la Ley de la Función Social de la Vivienda, y plantea también gravar más a los pisos turísticos, ya sea subiéndoles el recibo de la basura o creando otra nueva tasa por el inicio de esta actividad, tal y como se aprobó en el Pleno del Ayuntamiento celebrado el pasado mes de abril.
Del mismo modo, Izquierda Unida apuesta por incrementar un 100% la tarifa que actualmente pagan las casas de apuesta por la colocación de sus elementos publicitarios en la vía pública. Una iniciativa con la que IU busca combatir, desde la fiscalidad, el daño que este tipo de establecimientos está causando en los barrios obreros a muchas personas, especialmente jóvenes que, ante la falta de expectativas o de un futuro estable, terminan arriesgando en el juego sus rentas ganadas en trabajos precarios o lo que puedan sacar del núcleo familiar.
Igualmente, Izquierda Unida propone, una vez más, bonificar el IBI a las entidades de conservación urbanística de los polígonos industriales, al objeto de fomentar la actividad económica y la creación de empleo en estos enclaves productivos. Al respecto, Rojas ha recordado que el PSOE siempre solía defender esta enmienda cuando estaba en la oposición y, sin embargo, se ha olvidado de ella en estos tres años que lleva gobernando en la ciudad. “Esperemos que esta vez Espadas tenga el valor de aprobarla y de aplicarla”, ha apostillado.
Otra de las medidas que IU incluye en su paquete de enmiendas a las ordenanzas fiscales pasa por reducir determinados precios públicos del Zoosanitario Municipal, todo ello con el propósito de favorecer la adopción de los animales allí albergados, algo que, según Rojas, redundaría en el bienestar de éstos, al encontrar un hogar y, a su vez, supondría también un ahorro para el Ayuntamiento en gastos de manutención.
Por otro lado y en línea con su rechazo a las bajadas indiscriminadas de impuestos que Espadas ha pactado con PP y Ciudadanos, sin aplicar criterio de renta alguno, la federación de izquierdas también pone sobre la mesa una serie de enmiendas dirigidas a frenar este retroceso en fiscalidad progresiva. En este sentido, destaca la propuesta de congelar el IBI a fin de evitar la pérdida de ingresos municipales que implicará la reducción acordada por el PSOE con los partidos de derecha, ya que ésta sólo beneficia a una minoría de grandes propietarios y empresas, mientras se resienten las inversiones en los barrios y los servicios públicos del Ayuntamiento.
Asimismo, Izquierda Unida aboga por introducir criterios de renta y progresividad en la bajada propuesta por el gobierno local en el Impuesto sobre Construcciones, Instalaciones y Obras (ICIO) porque, como explica Rojas, “no es justo que se beneficien por igual de esta reducción fiscal un trabajador que quiere hacer una reforma en su casa y una promotora inmobiliaria que va a construir un hotel”. “En el primer caso, por ejemplo, la medida sí estaría justificada pero en el segundo no la vemos conveniente”, ha precisado.
Por último, Izquierda Unida vuelve a incidir en sus enmiendas, al igual que ha hecho el Consejo Económico y Social de Sevilla (CESS) en su dictamen sobre las ordenanzas fiscales de este año, en la necesidad de difundir las ayudas y bonificaciones existentes, sobre todo aquellas que van destinadas a las personas y colectivos más desfavorecidos, “para que de verdad éstas sean efectivas y útiles para quienes las necesitan”.
