El concejal de Hábitat Urbano del Ayuntamiento de Sevilla y portavoz del Gobierno local socialista, Antonio Muñoz, ha señalado este martes las "dificultades" de carácter laboral que afronta la integración del servicio municipal de Protección Ambiental en la Gerencia de Urbanismo después de que tal extremo fuese aprobado en 2018, precisando que en la negociación median casos de "resistencia a la movilidad" por parte de empleados públicos y llamando a "anteponer el interés general de los sevillanos", porque la operación está destinada a propiciar que en la ciudad "sea más fácil abrir un negocio".
En declaraciones a los medios de comunicación, Muñoz ha evaluado la negociación emprendida después de que en 2018 fuesen aprobados unos nuevos estatutos para la Gerencia de Urbanismo, al objeto de que dicho organismo autónomo del Ayuntamiento integrase las competencias de Medio Ambiente y los empleados asociados a las mismas y constituyese una ventanilla única para la concesión de las licencias de obras y de actividades, pues las mismas se tramitaban por procedimientos separados.
En ese sentido, ha admitido de nuevo que la negociación correspondiente al destino de los trabajadores del servicio de Protección Ambiental cuyas funciones son asumidas por la Gerencia de Urbanismo está encontrando "dificultades", al tratarse de un escenario en el que figuran casos de funcionarios y de miembros del personal laboral y mediar distintos casos en materia de retribuciones y condiciones laborales, según ha detallado.
Por eso, ha avisado de que se trata de una negociación "que lleva su tiempo", toda vez que ya habrían sido celebradas tres mesas de negociación sin que los representantes de los trabajadores hayan aceptado las propuestas del Gobierno local. Al respecto, el concejal ha señalado que "la resistencia a la movilidad, a pasar de un departamento a otro, puede estar retrasando el asunto", a la par que ha llamado a "anteponer los intereses de los sevillanos antes que cualquier cuestión interna del Ayuntamiento".
"NO ES UN CAPRICHO"
Y es que según ha defendido, la integración de las competencias de Medio Ambiente en la Gerencia de Urbanismo, un organismo municipal autónomo, "no es un capricho", sino una "respuesta" a la demanda del tejido empresarial respecto a una "simplificación administrativa, eliminación de cargas burocráticas y de duplicidades" de trámites, para que "en Sevilla sea más fácil abrir un negocio".
Por eso, ha avisado de que la operación "es irrenunciable", augurando que "más pronto que tarde, en el próximo mes", habrá un acuerdo que propicie la "unificación definitiva" de Medio Ambiente y Urbanismo, una operación en la que según ha asegurado, no se va a "perjudicar a nadie" porque los empleados del servicio municipal de Protección Ambiental que no sean incorporados a la Gerencia "van a seguir en Medio Ambiente" o podrán "recalar en cualquier otro departamento municipal".
