Cuando pensaba que su relación con la interpretación "había acabado" a Christina Rosenvinge le llegó la "insensata" propuesta de enfrentarse a su primer papel protagonista; el personaje, la escritora danesa Karen Blixen y la película, "Karen", presentada este domingo en el Festival de Cine Europeo de Sevilla.
"Pensé que interpretar a una de las escritoras más importantes del siglo XX en una historia que está recreada en una de las películas más famosas ("Memorias de África") por una de las actrices mas indiscutibles de todos los tiempos (Meryl Streep) era todo un desafío", ha asegurado a Efe la cantante y compositora, que comparte con Blixen el origen danés.
Le convenció que la propuesta de la directora, la extremeña María Pérez, era una visión "intimista" y completamente distinta. "El proyecto tenía mucha valentía y originalidad, los proyectos insensatos son los que realmente me gustan, los más excitantes", subraya Rosenvinge, autora también de la banda sonora.
Tanto las entrevistas como la posterior rueda de prensa telemática para presentar el filme tienen lugar en la Academia de Cine en Madrid, convertida en sede alternativa del festival sevillano que se celebra estos días a pesar de la complicada situación sanitaria.
Rodada en la dehesa extremeña, "Karen" ofrece un retrato íntimo de los últimos tiempos que pasó en Kenia la autora de "Memorias de África" y, en especial, en la relación con su criado somalí Farah Aden (Alito Rodgers).
"La película de Pollack ofrece una versión muy idealizada de lo que ya era el libro", observa Rosenvinge. De hecho, treinta años más tarde la autora danesa escribió otro libro, "Sombras en la hierba", en el que revisaba la historia.
"Ahí, el personaje que resurge de toda esa aventura no es su amante ni su marido, sino Farah y su vida doméstica, lo que ella se lleva de ahí es esa relación de complicidad y aprendizaje, una relación compleja porque al fin y al cabo eran una colona y un sirviente", destaca.
En este sentido, la directora, María Pérez, recuerda que Blixen "se llevaba mal" con los colonos ingleses por su trato a nativos y somalíes. "Ella tenía una relación más cercana, no iba a muchas fiestas, tuvo una existencia muy solitaria después de su divorcio y su principal compañía fue su amigo Farah, con quien se pasaba horas hablando de lo divino y lo humano, ambos tenían una fe inquebrantable en el destino".
La relación de Rosenvinge con el cine ha sido hasta ahora escasa aunque en los 90 participó en un par de películas de éxito como fueron "Todo es mentira" (1994), junto a Coque Malla y Penélope Cruz, y "La pistola de mi hermano" (1997) de Cesc Gay.
"Siempre he tenido ganas de hacer cine, y el cine es una influencia en la música que hago, pero no he dedicado tiempo a buscar activamente. Me interesa mucho tanto la interpretación como la composición de música para cine y en esto último sí que tengo algún proyecto más", avanza.
El año pasado además publicó su primer libro, "Debut", un ejercicio de autoficción que gira en torno a sus canciones. "Para mi está todo unido, la escritura, sean letras de canciones, ficción, autoficción, la interpretación... no me resulta antinatural moverme de una cosa a otra".
Volviendo a la figura de Blixen, dice que lo que más le atrae de ella es que representa un mito universal, un arquetipo humano.
"La persona que tiene un sueño y que fracasa y gracias a ese fracaso encuentra su verdadero destino", dice en referencia al hecho de que Blixen floreció como escritora al regresar a Dinamarca después de tener que abandonar, acuciada por las deudas, su plantación de café en Kenia.
Está previsto que "Karen" llegue a las salas de cine en 2021.