El Gobierno ha matizado que "no es de obligado cumplimiento" la recomendación a los profesores para que hagan "un seguimiento de hashtags y menciones relacionadas con el centro educativo en las redes sociales preferidas por el alumnado, así como la creación de alertas en buscadores con términos relacionados con el centro educativo", recogida en una guía aprobada por el Observatorio Estatal de la Convivencia Escolar.
"El documento es fruto de un trabajo de participación y análisis, si bien no es vinculante, por lo que sus indicaciones no son de obligado cumplimiento puesto que la competencia en materia de organización y gestión de los centros docentes corresponde a las administraciones educativas en su ámbito territorial", ha señalado el Ejecutivo en una respuesta parlamentaria, a la que ha tenido acceso Europa Press.
Así ha respondido el Gobierno a una pregunta registrada por el Grupo Parlamentario Popular en el Congreso de los Diputados, en la que pedía explicaciones al Ejecutivo sobre la propuesta del Ministerio de Educación y Formación Profesional para que "los docentes controlen las redes sociales de los alumnos, tanto en la monitorización de comentarios como en el seguimiento de hashtags".
Durante un encuentro informativo con medios de comunicación, fuentes del Ministerio explicaron que los profesores "deben intentar vigilar" también las redes sociales para buscar si hay ciberacoso, estando "al tanto" de las plataformas que utilizan los alumnos. No obstante, Educación reconocía que hay "muchos profesores" que no están formados en las redes sociales, por lo que aconseja, en la medida que las conozcan, "hacer una revisión".
En este contexto, el Gobierno ha recordado que las 'Recomendaciones para Trabajar la Ciberconvivencia en los Centros Escolares' aprobada el pasado mes de noviembre por el Observatorio Estatal de la Convivencia Escolar, recoge recomendaciones "para mejorar la ciberconvivencia en los centros, que incluyen la elaboración de protocolos ante las problemáticas relacionadas con Internet, la formación para el profesorado, el alumnado y las familias y pautas para la detección de posibles conflictos y la gestión de estos mismos.
"En cada apartado incorpora ideas de acciones concretas para aplicar en el centro educativo, así como numerosos enlaces a recursos adicionales. Para su elaboración se ha contado con la colaboración de expertos en el ámbito de la ciberconvivencia y con las aportaciones de los propios miembros del grupo de trabajo", ha subrayado el Ejecutivo.
Durante la presente legislatura, el Ministerio ha reactivado las actuaciones del Observatorio Estatal de la Convivencia Escolar, que ha puesto en marcha un grupo de trabajo sobre ciberconvivencia, en el que participan las comunidades autónomas, el Instituto Nacional de Ciberseguridad de España (INCIBE), sindicatos de personal docente y no docente o representantes de asociaciones de familias y estudiantes, entre otros.