La Confederación Católica Nacional de Padres de Familia y Padres de Alumnos (CONCAPA), que representa a más de tres millones de familias, no apoya la huelga general del sector educativo convocada para este jueves pues, aunque se muestra descontenta y discrepa de los recortes en materia educativa y de la Ley Orgánica de Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), considera que el jueves es un día lectivo y no se debe "perjudicar más la educación".
Así, aunque se desmarcan de las movilizaciones, sí piden que se corrijan algunas "importantes carencias" de la nueva ley que, en todo caso, "mejora la calamitosa legislación derivada de la LOGSE que ha llevado a una tasa de abandono y fracaso escolar de los más altos de Europa".
Concretamente, CONCAPA propone: ofrecer mejoras sustanciales en los niveles de Infantil y Primaria; dar respuesta a la demanda social de plazas escolares en los centros concertados; y reconocer la "complementariedad" entre la red pública y la concertada, para que esta última no sea tratada como "subsidiaria de la primera".
En este sentido, los padres denuncian que "no se destinan los mismos recursos" y se "penaliza" a la concertada "pese a ofrecer mejores resultados y ser de menor coste económico". Además, piden "igualdad de trato" de forma que el Bachillerato sea gratuito en las dos redes.
Asimismo, sugieren que los resultados de las evaluaciones externas al final de cada etapa sean de conocimiento público; que se generalice el bilingüismo desde Infantil así como las pruebas extraordinarias de septiembre y las recuperaciones desde cursos inferiores; y que se incorpore en todas las etapas la figura del psicólogo escolar.
Finalmente, consideran necesario fortalecer la autoridad y el prestigio social del profesorado y reclaman que se mejore la selección y formación del mismo.