Sagardoy Abogados considera necesario una apuesta para convertir a España en destino pionero mundial para acoger teletrabajadores. Su presidente, Iñigo Sagardoy, señala que “España tiene todo para que sea un destino natural de teletrabajadores de todo el mundo”.
‘Teletrabajo’ fue uno de los términos valorados como palabra del año para la RAE en 2020, junto a ‘confinamiento’, la ganadora, y ‘coronavirus’. La pandemia ha transformado y convertido el teletrabajo en una realidad cada vez más implementada en la gran mayoría de las empresas españolas. Y esta nueva realidad obligó al Gobierno a aprobar el Real Decreto-Ley 28/2020 que entró en vigor el pasado mes de octubre para regular el teletrabajo.
Pero en España aún queda mucho camino por recorrer para igualarse a países de su entorno en lo que se refiere al teletrabajo. Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) tanto del tercer trimestre como del cuarto de 2020, alrededor de dos millones de ocupados (un 10%) trabajaron desde su casa esos días. Antes de la pandemia en 2019 sólo un 4,8% lo hacían todos o algún día de la semana.
Esta tendencia ha supuesto que las empresas adopten soluciones y los expertos consideran que seguirá evolucionando. En este sentido, Iñigo Sagardoy, presidente de Sagardoy Abogados, despacho referente en Derecho Laboral en España, explicó en una entrevista a ‘Navarra Capital’ que en su despacho ya se ha creado un grupo de trabajo “que solo analiza y está viendo como un hilo conductor cómo se están aplicando las nuevas medidas de teletrabajo, cómo están aplicando las empresas las buenas prácticas sobre este aspecto y qué impacto está teniendo la nueva ley”.
Según, Iñigo Sagardoy el teletrabajo tiende hacía un modelo mixto. “Lo que estamos observando es que, por un lado, las empresas no van a ir al modelo teletrabajo cien por cien, puede haber algún sector o empresa concreta, pero no creo que sea un modelo que vaya a quedarse para el resto de la vida. Las empresas están optando por un modelo flexible, híbrido: teletrabajo una parte, teletrabajo presencial, porque también es necesario no perder el contacto, la cultura empresarial, el trabajo en equipo”, explica.
Una de las reflexiones que destaca Iñigo Sagardoy tanto para el presente y el futuro a nivel de país, es que España debería convertirse en un referente internacional para acoger teletrabajadores de todo el mundo. En su opinión, y con las condiciones que puede ofrecer España a todos los niveles, “creo que estamos perdiendo el tren de una gran oportunidad que tiene España y es que sea un país de destino pionero de teletrabajo a nivel mundial. España tiene todo para que sea un destino natural de teletrabajadores de todo el mundo”.
Asimismo, indica que regular en permisos de trabajo y migratorios y en algunos aspectos laborales sería fundamental para conseguir atraer a teletrabajadores a nuestro país. “Nos falta, y quizás hay otros países que nos están adelantando, una regulación distinta en algunos aspectos laborales y fiscales para el teletrabajo, Y sobre todo una regulación inmigratoria distinta, en aspectos de permisos de residencia, que en España están muy ligados para trabajar por cuenta ajena. Es muy difícil para los extranjeros trabajar por cuenta propia, como autónomo que es gran parte de muchos teletrabajadores. Deberíamos hacer esos cambios para decir que somos un país que atraemos este talento a España. Y eso luego es un círculo virtuoso porque ese teletrabajador que se queda en España aparte que puede comprar una vivienda, a lo mejor crea una pequeña empresa que crea empleo, cotiza a la seguridad social, etc. Ahí podíamos ser pioneros e innovadores de ser grandes receptores de teletrabajadores a nivel mundial”.
A este respecto, ya hay comunidades autónomas como Canarias que han implementado planes para atraer profesionales tanto nacionales como internacionales que puedan trabajar en remoto desde las islas. Los últimos datos confirman que la iniciativa se está convirtiendo en éxito, ya se habrían instalado en la comunidad unos 8.000 profesionales llegados de Europa y Estados Unidos.
En el aspecto laboral desde que entró en vigor la ley, Sagardoy destaca que las empresas están la están aplicando de forma razonable: “Hay que tener en cuenta que hay una llamada muy clara a los acuerdos colectivos con la nueva ley del teletrabajo, que hacen que los convenios estén regulando medidas de teletrabajo de manera muy acelerada, que está siendo satisfactorio tanto para el trabajador, que está contento, concilia y es productivo, tanto para la empresa. Sobre todo, se implanta una cultura que las empresas también lo están aprovechando para otros aspectos, que es la cultura de la flexibilidad. Se puede aprovechar para otras formas de trabajo menos jerárquicas, más horizontales o de más trabajo en equipo”, asegura en la entrevista.