Continúa el culebrón de la limpieza en Torremolinos. El pasado viernes, 14 de septiembre, se celebró el Consejo de Administración de Litosa, la empresa municipal de limpieza, en el que el concejal de Empresas Municipales, César Carrasco, pidió el cese del gerente. Sin embargo, esta propuesta no salió adelante a raíz de los votos en contra del Partido Popular y Ciudadanos.
Precisamente, esta petición surgió después de que el PP pidiese responsabilidades por la situación de la limpieza en el municipio. “Una responsabilidad que recae directamente en la gerencia, que con un 17% más de personal, un 14% más de gasto y nueva maquinaria, no está gestionando bien los recursos”, aseguró entonces el edil.
Según el PSOE, a través de un comunicado, “el exconcejal del PP (en referencia al gerente), fue nombrado como máximo responsable de Litosa tras un ‘dedazo’ del Partido Popular que lo blindó en 2013 con un contrato de 77.000 euros anuales, sin formación alguna, sólo graduado escolar, y olvidando los principios de oportunidad, mérito y capacidad que deben regir en la contratación pública”.
“El PP ha consolidado así su apoyo a un hombre fuerte en la campaña de Margarita del Cid, por lo que, pese a emitir quejas continuas sobre la situación actual de la limpieza del municipio, seguirán avalando a su compañero de filas como máximo responsable de la empresa de limpieza y teniendo el control de las labores y ejecuciones que se llevan a cabo”, continúan desde el grupo municipal.
Carrasco mostró su “falta de confianza en el actual gerente, quien por el mero hecho de preocuparme por la situación de la limpieza en el municipio me acusó de arrebatarle sus funciones”.
Según el portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Torremolinos, Antonio Ruiz, “no tiene sentido que el PP lleve quejándose tres años de la suciedad y busquen el responsable en el PSOE cuando mantienen a un exconcejal del PP en el cargo para así utilizar la limpieza como arma arrojadiza contra el gobierno municipal”.
Asimismo, los socialistas explican, a través de un comunicado, que el contrato del gerente está “aderezado con un sustancioso sueldo de 77.000 euros anuales, y unas condiciones irregulares, ya que mantiene una antigüedad desde 1999, cuando realmente comenzó a ejercer de gerente en 2013. Esto permitirá a Margarita del Cid y el Partido Popular seguir beneficiándose en la sombra del chiringuito clientelar que crearon en su gobierno”.
El PP, por su parte, solicitó el cese de Carrasco, cuestión que no llegó a votación por no ser el consejo un órgano competente para ello.
