El Juzgado de lo Penal número 10 de Málaga ha condenado a cuatro años de cárcel a un agente de la Guardia Civil, acusado por el accidente en el que murieron tres personas y varias resultaron heridas, ocurrido en junio de 2017 en la A-7 a la altura de Torremolinos. Además, deberá indemnizar a los perjudicados con unos 1,4 millones de euros.
Según se declara probado en la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, el acusado había ingerido previamente bebidas alcohólicas y una alta dosis de cocaína, “lo que afectó a sus facultades psicofísicas para la conducción y el control del vehículo”.
Así, “por el estado de excitación en el que se encontraba y con inobservancia de la diligencia más indispensable y cautela”, circulaba por el carril izquierdo de la autovía “a una velocidad muy alta, 149 kilómetros por hora, cuando la vía tiene una limitación genérica de 120 y una limitación específica en ese tramo de 100 kilómetros por hora”, dice la resolución.
En un momento dado, y tras rebasar por la izquierda a un vehículo, el acusado empezó a retornar hacia el carril derecho de la vía, impactando por alcance con otro coche. Tras el impacto, “y dada la alta velocidad a la que circulaba el acusado”, continuó su marcha hasta invadir la zona de exclusión a la circulación “para introducirse en el carril izquierdo de la AP-7 por el que avanzaba un taxi”.
El vehículo del acusado colisionó contra ese taxi que tras el golpe se desplazó hacia la derecha y comenzó a dar vueltas de campana saliendo despedidos cinco de sus ocupantes, según indica la sentencia, apuntando que a causa del accidente fallecieron un hombre y una mujer de Bahrein y otra mujer de Kuwait, con vínculos familiares; mientras otras nueve personas resultaron heridas.
Así, se le condena por un delito de conducción bajo la influencia de bebidas alcohólicas y sustancias psicotrópicas, otros de conducción temeraria, tres delitos de muerte por imprudencia grave y nueve delitos de lesiones imprudentes. Además, se le impone la prohibición de conducir durante cinco años con pérdida de vigencia del permiso.
Este acusado, que está en prisión, tiene ya otra condena por hechos similares. Así, el Juzgado de lo Penal número 6 de Málaga le impuso un año y medio de cárcel por conducir bajo los efectos del alcohol y colisionar en mayo de 2014 con su vehículo contra otros, tras lo que huyó del lugar sin someterse a las pruebas de alcoholemia. Esta sentencia está recurrida.