El Jardín Botánico Molino de Inca, uno de los principales atractivos de Torremolinos, será accesible para todos. Las obras, con un plazo de ejecución de cuatro meses, darán comienzo en el primer trimestre de 2020. Asimismo, los trabajos se sacarán a concurso público en próximas fechas y tendrán un valor de ejecución de 278.341,78 euros. El proyecto surge tras la petición del Ayuntamiento de una subvenciones a los Municipios Turísticos de Andalucía por parte de la Junta, para alcanzar la accesibilidad universal de los Recursos Turísticos Culturales, de forma que se permita su disfrute por todas las personas, según informó la concejala de Infraestructuras, Maribel Baeza, en una rueda de prensa.
Qué va a cambiar
Las actuaciones que se contemplan son en el tramo de rampa entre el acceso a los aseos públicos y el espacio principal de acceso al jardín; entre el almacén (que se rehabilitará como kiosco) y los aseos públicos; en el espacio junto a la fuente de la rotonda y el nuevo kiosco; entre el Albercón y el espacio junto a la fuente de la rotonda, permitiendo el acceso al espacio de exhibiciones; en el tramo aviario norte; en el tramo Casa Manantial; así como una reforma para la adaptación de los aseos públicos.
“Este conjunto de actuaciones permite un recorrido de acceso, registro y salida del jardín botánico que conecta los espacios más significativos para conocer el sitio y sus monumentos, y a sus servicios públicos. Además, ofrece la posibilidad de la estancia en espacios potencialmente funcionales para actividades celebradas en el jardín municipal”, explicó Baeza.
Para la redacción del proyecto se han utilizado los criterios fundamentales de diseño que entre otros son recomendados en el Manual de Buenas Prácticas sobre Accesibilidad en Espacios Naturales de Andalucía.
En concreto, al inicio y a lo largo del recorrido habrá paneles informativos, dispuestos a distintas alturas y algunos de ellos, inclinados para facilitar su lectura, así como la utilización de colores para el mismo fin. Asimismo, dispondrán de referencias táctiles o sonoras para personas con discapacidad visual. También habrá varias zonas de descanso accesibles para usuarios de silla de ruedas y personas de movilidad reducida.
Por último, la ejecución de las reformas se llevará a cabo con la mínima afección a la masa arbórea y respetando la percepción del paisaje natural existente.
