La vicepresidenta del Gobierno en funciones y líder de Sumar sigue acumulando méritos para que los andaluces podamos pensar que no tiene ningún afecto a nuestra tierra. En ocasiones, incluso, les reconozco que llego a preguntarme: ¿Qué le ha hecho el Sur a Yolanda Díaz para que no tenga ningún gesto con los andaluces? Y para sustentar mis dudas razonables sobre su animadversión o ninguneo tiraré de hemeroteca: apenas se dignó a venir a Andalucía en la pasada legislatura como ministra de Trabajo a la región con más paro del país, ni siquiera durante la durísima huelga del metal en Cádiz o cuando cerró la planta de Airbus en Puerto Real mientras inauguraban las mega instalaciones del gigante aeronáutico en Getafe.
Recordemos otros desaires de Díaz con la comunidad más poblada de España. Lleva más de un año -con especial empecinamiento en la pasada campaña electoral- reivindicado que Navantia no dependa de la Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), es decir, del Ministerio de Hacienda, para intentar neutralizar la evidente apuesta de la ministra andaluza María Jesús Montero por llevar carga de trabajo a los tres astilleros de la Bahía de Cádiz. Sabe que dependiendo Navantia del Ministerio de Industria, aún con un ministro socialista, podría derivar más pedidos a los astilleros de Fenede su querido terruño de Ferrol.
Otra más, ésta en el grupo parlamentario: nombra portavoces de Sumar a los catalanes de Comuns, a los valencianos de Compromís y a los aragoneses de la Chunta Aragonesista, y olvida a los diputados andaluces que son los que más escaños aportan. Por cierto, clamoroso el silencio de los diputados andaluces de Sumar que no casa justamente con el malestar que sienten con este desprecio.
Lo último fue forzar en la redacción del acuerdo PSOE-Sumar, evidentemente para contentar a Compromís, que quedara recogido un fondo de nivelación de servicios para Valencia. Sólo la presión del PSOE permitió salvar un poco los muebles al añadir: “y el resto de las comunidades infrafinanciadas”. ¿Por qué no quiso incluir a Andalucía? Ausencia que ha sido munición de alto calibre para el PP andaluz y la Junta en su estrategia victimista de que Madrid nos maltrata.
Veremos cuál será la próxima jugada de la vicepresidenta con Andalucía, aunque debería cuidarse un poco que el pueblo andaluz que le dio 6 diputados empieza a calarla cansado de un dicho que ha sufrido reiteradamente: mucho te quiero perrito (para pedirte el voto en actos electorales), pero (luego) pan poquito.