Salteras albergará a partir de la próxima primavera una nueva planta de producción de biometano que inyectará gas renovable a la red de Andalucía Occidental. Esta planta, que se enmarca dentro de una serie de proyectos de economía circular en la región, contribuirá significativamente a la reducción de gases de efecto invernadero y al desarrollo de las zonas rurales.
Ubicada en una parcela en el kilómetro 3 de la carretera SE-3410, la planta de Salteras iniciará su construcción en 2024 tras haber obtenido la autorización ambiental en 2023. Con una inversión estimada de 20 millones de euros, la instalación generará 72 gigavatio-hora (GWh) de biometano al año, lo que cubrirá el consumo energético de más de 19.000 hogares. Además, se espera que esta planta reduzca la emisión de 8.000 toneladas de dióxido de carbono al año, lo que equivale a la contaminación generada por más de 2.200 coches en circulación durante todo un año.
El proyecto utilizará residuos orgánicos como gallinaza, restos de la industria alimentaria animal y otros desechos agroindustriales, que se convertirán en biometano gracias a un proceso de tratamiento que alcanzará las 140.000 toneladas anuales. La planta no solo se perfila como un avance significativo en la generación de energía renovable, sino que también fomentará la creación de empleos, con alrededor de siete puestos de trabajo directos y decenas de empleos indirectos durante la fase de construcción y operación.
David Piñero, director general del proyecto, ha destacado la importancia de la iniciativa para la mejora del entorno rural y el medioambiente, señalando que "no solo estamos favoreciendo el desarrollo económico local, sino también ofreciendo soluciones a problemas ambientales globales como la gestión de residuos, la mejora de los suelos y la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero".