Almería y Real Sociedad empataron a dos goles en un entretenido encuentro en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, en el que el conjunto local se adelantó por dos veces en el marcador, encontrando respuesta en ambas ocasiones en el equipo donostiarra.
El partido comenzó muy favorable al Almería, ya que en su primera llegada al área rival se adelantó en el marcador. En el segundo minuto de juego, una jugada de Michel Macedo por banda derecha acabó en derribo de Rulli sobre Thievy, quien había controlado mal el esférico. Verza puso el 1-0 desde los once metros.
La Real llevó la iniciativa en busca del empate, aunque le faltaba profundidad. En cambio, encontró el gol a los 27 minutos en una acción a balón parado que Agirretxe peinó en el área hacia el fondo de la red, con la ayuda de Julián Cuesta.
El partido siguió el mismo desarrollo tras la igualada. La Real era quien dominaba el esférico, pero sin llevar al área rival apenas peligro, algo que sí parecía tener el Almería cada vez que se aproximaba por las bandas con Thievy, por la izquierda, y Wellington Silva, por la derecha. A veces, era el propio meta visitante Rulli, muy impreciso durante toda la noche, el que se complicaba más de la cuenta.
En una de esas llegadas por banda, Thievy protagonizó la mejor jugada del partido y que a la postre significó el segundo gol de los rojiblancos, a los 40 minutos de juego, tras irse por línea de fondo de cuantos rivales le salieron en su camino al área y entregando el balón atrás para que Hemed perforara la red.
La Real salió en tromba en la segunda mitad en busca del empate y lo ha conseguido pronto, cuando se cumplían los tres minutos de la reanudación. Antes, Canales dio un aviso en un golpe franco que ha lanzado a escasos centímetros de la portería de Julián Cuesta. En la acción siguiente, el cántabro ha roto el eje central formado por Fran Vélez y Dos Santos, aprovechando un pase al hueco, dejó en el césped al portero local y estableció de nuevo la igualada.
El conjunto de Moyes continuó llevando el mayor peso del juego, con el Almería buscando acciones aisladas en las que sacar provecho de la velocidad y el desborde de Thievy. Sin ocasiones claras por uno ni otro lado, la mejor la tuvo Édgar en el tiempo de descuento para haber decidido la balanza del lado local, aunque su remate no encontró el camino de la portería.